Las señales de una relación de pareja a punto de romperse
En todas las parejas existen crisis, y malos momentos que ponen en peligro la continuidad de la propia relación. Son acontecimientos duros, que pueden llegar a ser terriblemente traumáticos, y si no se gestiona bien, es muy probable que ello haga mella en la salud de la relación, incluso puede comprometer su continuidad. Para poder tener la oportunidad de prever el daño que puede llevar consigo dichas crisis de pareja, debes aprender a cómo saber si tu relación de pareja se está rompiendo. Y en este artículo te proporcionaré todas las claves para identificar cuando existe un problema serio que pueda romper cualquier relación de pareja.
Es cierto que a veces son los problemas, o los conflictos, los que van mermando la buena salud de una pareja, pero a veces simplemente es porque los sentimientos se disipan, y desaparece el amor. Puede ocurrirte a ti y a tu pareja, y entonces la continuidad de vuestra relación es simplemente insana, ya que mantener cualquier relación cuando no existen los sentimientos que deberían ser sus pilares, solamente trae sufrimiento y dolor.
Toda relación debería sustentarse mediante pilares tan sólidos como el respeto, el amor, la amistad o la libertad, entre otros. Cuando una relación se tambalea porque sus pilares no son firmes, puede llevar a la ruptura definitiva. Debemos pensar que una relación de pareja debe estar constituida por dos personas libres y diferentes que deciden compartir su camino con la otra persona. Y por ello, todo el mundo es igualmente libre para irse del lado de su pareja, ya sea porque esa relación le haga daño, como porque ha dejado de sentir ese amor por su pareja. Los sentimientos pueden cambiar, y debemos aceptarlo.
Cuando algo no funciona en una pareja, ambas personas lo saben. Pueden mirar hacia otro lado, o intentar aparentar cierta normalidad, pero cuando algo se ha roto dentro de una relación de pareja, se sabe. Lo realmente difícil es gestionarlo, y saber como afrontarlo. Aprender cómo saber si tu relación de pareja se está rompiendo es esencial para poder estar alerta ante las señales. Quizás de ese modo, podrías reconducir la relación mientras aun haya sentimientos que se conviertan en los nuevos pilares de vuestra unión.
Cómo saber si tu relación de pareja se está rompiendo
Existen multitud de señales que pueden indicar que nuestra relación de pareja está a punto de romperse. Al final, somos nosotros mismos quienes tenemos que reflexionar acerca de como está nuestra relación con nuestra pareja, y si todo se puede reconducir. En esos momentos tenemos que ser sinceros con nosotros mismos y con la otra persona, y tomar las decisiones que debamos tomar. No podemos mirar hacia otro lado, ni esperar que todo se solucione por si solo. Si no tomamos esas decisiones, al final nuestra relación acabará por destruirse por completo, y es algo que quizás podemos evitar. Y entre las señales más sólidas que pueden indicar que nuestra relación corre peligro están:
- Cambios en el compromiso. Todas las relaciones comienzan por el compromiso. Los sentimientos nos hacen querer comprometernos con la otra persona, y hacer planes de futuro. Cuando ya no existen dichos planes, o no se cuenta con la pareja para hacer cosas en común, puede ser una señal de que algo no funciona en vuestra relación. Al final, hacer planes para un futuro es lo que sustenta al propio compromiso. Si cada uno toma un camino diferente al del otro, es porque algo está fallando, y quizás todo acabe por romperse de un modo definitivo.
- La falta de comunicación. Hablar, compartir, reírse, son cosas necesarias para que toda relación prospere. Es importante tener una buena comunicación con la pareja, y que podáis compartir todas vuestras experiencias y vivencias, así como los propios sentimientos e inquietudes. Una pareja que muestra indiferencia por la otra persona, y no puede compartir nada de su vida con ella, esos silencios acabarán por romper cualquier relación, ya que ninguna unión se sustenta mediante la indiferencia ni por el hastío. Debemos saber que la falta de comunicación a menudo lleva a la frustración, cuando aparecen los gritos, las palabras hirientes, y los malos gestos, y es un límite que nadie debería traspasar, porque una vez que se hace, la relación de pareja acabará por romperse.
- No hay complicidad. Cuando dos personas se unen, y se comprometen, todo lo que comparten y han compartido les hace cómplices. Es decir, uno conoce al otro en lo bueno y en lo malo. Las parejas que van bien, no tienen que hablarse, basta a menudo con un simple gesto o una mirada para decirse todo. Esta complicidad es fruto del amor y de compartir el camino con la otra persona. Conocerse, y saber como piensa, y como actúa la otra persona es algo intrínseco de toda pareja. Si esa complicidad se pierde, y se da paso a emociones tan dañinas como el rencor, la rabia, la desconfianza o los celos, es cuando la propia relación se tambalea hasta llegar a romperse.
A veces el amor no lo puede todo. Los problemas, los conflictos, o el propio estado emocional de una persona puede repercutir en la continuidad de cualquier relación de pareja. Debemos estar en alerta cuando estas señales aparecen, ya que pueden indicar que nuestra relación está a punto de finalizar. Si te preguntas: ¿cómo saber si tu relación de pareja se está rompiendo?, decirte que debes hacer caso a las señales y a tu propia intuición.
El dolor de saber que nuestra relación se puede romper
Comprobar que nuestra relación de pareja se está rompiendo, y no sabemos como actuar, ni que hacer, es algo realmente frustrante que puede llevarnos a padecer una angustia muy elevada. Esa angustia tan elevada puede llevarnos a desarrollar un cuadro ansioso. La ansiedad es muy frecuente cuando no sabemos como gestionar un problema de tal magnitud, y nuestros niveles de estrés se elevan sin control.
Además de la ansiedad, enfrentarnos a una posible ruptura, puede llevarnos a padecer una bajada brusca de nuestro estado de ánimo. La depresión puede ser una de las grandes consecuencias de saber que nuestra relación de pareja se puede romper. Es muy difícil enfrentarse a este tipo de situaciones donde algo tan importante como la continuidad de nuestra relación se vea en peligro.
Sufrir una posible ruptura de pareja puede desarrollar en nosotros ciertas emociones, como puede ser el peligroso sentimiento de culpa, la tristeza, el rencor, o la rabia. No podemos dejar que esas emociones empeoren aún más la situación, y nos nublen el modo de pensar y actuar. Debemos alejarlas, y estar lo más tranquilo posible, para así poder tomar las mejores decisiones. El dolor y el sufrimiento nos puede levar por caminos equivocados, donde encontraremos más oscuridad de la que padecemos.
Cómo afrontar una posible ruptura
Antes de tomar una decisión definitiva, deberíamos realizar un verdadero ejercicio de reflexión acerca de todo lo que sentimos, y todo lo que queremos conseguir respecto a nuestra pareja. Una vez que seamos consciente de todos esos sentimientos, y de los problemas reales que están afectando a nuestra relación de pareja, deberíamos entonces comunicarnos con la otra persona. Debemos escucharle, y conocer tanto sus propios sentimientos, como sus objetivos respecto a la continuidad de la relación.
Si aún existen los sentimientos que un día hicieron comprometeros el uno con el otro, se debería trabajar para afrontar todos esos problemas o diferencias. Para ello se necesita una actitud activa, y la firme voluntad de efectuar todos los cambios que sean necesarios. En ese punto sería totalmente recomendable la iniciación de una terapia de pareja. Es importante tener un punto de vista ajeno a la propia pareja, y las herramientas necesarias para reconducir vuestra unión, y que se sustente en pilares tan sólidos como el respeto, el cariño, o la libertad.
En los casos donde ya no hay los mismos sentimientos, ni relación que salvar, lo fundamental es proceder a una ruptura lo más constructivamente posible. Debemos evitar hacernos y hacer daño. Es esencial que si nuestra relación se rompe, hacerlo de un modo lo más cordial y sano posible, sin rencores, sin buscar culpables, ni hacerse más daño. Para ello es necesario una buena actitud, y la sinceridad suficiente para reconocer que si continuamos con esa relación vacía, solamente generaremos más sufrimiento para ambas partes. ¡Adelante!
Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online