Los 5 rasgos más comunes de las personas negativas

Cómo son las personas negativas

Las personas negativas son devoradoras de energías, capaces de estar a tu lado y con esa actitud tan tóxica robarte toda tu positividad y toda tu energía. Son personas sumidas en un oscuro pozo personal del cual no saben salir, y absorben a los demás a ese mismo abismo. Realmente son personas capaces de destruir por completo todo lo que rodea, y minar tu estado psicológico, logrando sumergirte por completo en su oscuridad. Por ese motivo, es esencial saber cómo son, y para ello debemos aprender los 5 rasgos más comunes de las personas negativas.

Tenemos que tener en cuenta de que son personas que sufren. Nadie quiere adoptar esa actitud, ni percibir todo su mundo como algo negativo y hostil. Las personas que podemos llegar a considerar negativas, son personas que han sufrido tanto que no son capaces de ver la luz por ningún lado. Por lo tanto, son personas a las que debemos ayudar, pero aun así no podemos nunca dejarnos arrastrar a su abismo emocional. Debemos establecer los límites necesarios para no ser arrastrados por esa persona.

La negatividad es una actitud que algunas personas adoptan por cualquier motivo, ya sea porque es su modo de ser, o porque han sufrido durante toda su vida, o quizás también porque ese tipo de postura ante la vida les permite tener la atención que necesitan ante los demás. Sea como sea, ser una persona negativa genera un gran dolor y sufrimiento, porque esas actitudes tóxicas siempre acaban por afectar a todos los ámbitos de la vida de quien es así, e incluso acaban por quedarse solas debido a su gran negatividad. Nadie quiere estar al lado de alguien que le arrebata todas sus energías.

Toda persona negativa debería tener ayuda psicológica, pero por su estado psicológico o emocional son incapaces de identificar qué les ocurre, y de pedir la ayuda que necesitan. Es por eso que las personas que les rodea acaban por alejarse de ellas. Al ser incapaces de iniciar el cambio que necesitan acaban por asentar esa forma nociva de ser y de comportarse, y ello les genera un gran sufrimiento. Es importante saber cómo son ese tipo de personas, y si te sientes identificada pedir la ayuda que necesitas. Y para ello revisaremos los 5 rasgos más comunes de las personas negativas.

Los 5 rasgos más comunes de las personas negativas

Entre los 5 rasgos más comunes de las personas negativas encontramos:

1-. Quejarse por todo.

Las personas con unos rasgos negativos siempre se estarán quejando por todo. Al final las cosas relacionada con su vida no es como quieren, y como no saben como cambiar, se frustran y comienzan a quejarse de un modo constante. Ante cualquier cosa, una persona negativa siempre tendrá una queja en la boca. Esa queja realmente se podría considerar una llamada de atención. Son personas que sufren de forma extrema, y necesitan que los demás le presten algo de atención. Lo que ocurre es que esas llamadas de atención mediante la queja pueden llegar a alejar a todas las personas de su alrededor, debido a que suponen un desgaste emocional para el oyente.

Quien se queja es porque necesita expulsar toda su frustración e impotencia al exterior. Es el modo que tienen las personas negativas de deshacerse de toda esa carga. Pero al exteriorizar aquello que no nos gusta o nos perturba puede desencadenar el rechazo de las personas que están alrededor de ese tipo de personas. Nadie está dispuesto a soportar la carga que supone toda esa “basura emocional”. Ese aislamiento puede llegar a ser letal para el estado de ánimo de las personas negativas- Son comportamientos tan tóxicos que acaban afectando tanto a quien los realiza como a quien los soporta.

2-. No soportan la frustración.

No es cierto que las personas negativas no quieran cambiar, y ser de un modo diferente, pero son incapaces de dar el paso ni saber qué proceso realizar para ello. Este hecho les puede llevar a sentirse totalmente frustrados debido a que se sienten totalmente incapaces de salir de ese abismo donde viven de forma permanente. Esos sentimientos de incapacidad les puede llevar a dar pasos a emociones tan dañinas como la ira o la rabia, además de sentir una profunda tristeza que les empuja al fondo de ese poco oscuro donde un día cayeron.

La frustración solo trae malestar, dolor y un gran sufrimiento. Ese estado de hundimiento emocional solo alimentan la actitud negativa de ese tipo de personas. Un gestaste psicológico que puede llegar a destruir emocionalmente a las personas negativas. Es importante para ellos saber gestionar esos estados de frustración, y dar los pasos que sean necesarios para ir saliendo de ese abismo en el cual habitan. Las actitudes negativas se pueden cambiar, así como el modo en el cual percibimos el mundo que nos rodea. No podemos envolvernos en las sabanas del miedo y de la angustia. Si la negatividad está implantada en nosotros, debemos antes de todo identificar que nos ocurre, y posteriormente afrontarlo del modo eficaz que nos proporciona la terapia. No podemos mirar hacia otro lado, y que la oscuridad se apropie de todo aquello que somos, convirtiéndonos en la sombra de las personas que un día fuimos. Debemos aprender a pedir ayuda, y a cambiar todo aquello que no funciona en nuestra vida, y nos genera dolor y sufrimiento. Podemos iniciar el cambio, y cambiar el modo de percibir nuestro mundo. 

3-. Se rinden con facilidad.

Las personas con los rasgos de personalidad negativos ven en cada paso un obstáculo, y es por eso que nunca se atreven a hacer nada, quejándose por todo. Todos pasamos por dificultades o adversidades que nos hacen superarnos, pero para estas personas esos mismos obstáculos se convierten en montañas difíciles de salvar. Por lo tanto suelen rendirse con facilidad, y tirar la toalla.

Todos en alguna ocasión hemos tenido la tentación de desistir en lo que estamos haciendo, ya sea porque es muy difícil o no sabemos como afrontar las adversidades, pero siempre acabamos por intentarlo una y otra vez hasta que lo conseguimos en la mayoría de las ocasiones. Pero las personas negativas ante cualquier dificultad simplemente tiran la toalla y siguen con otra cosa. Son incapaces de insistir e intentar superarse. Su estado psicológico negativo les hace incapaces de superar cualquier adversidad que tengan enfrente de ellos. 

4-. Se comparan con los demás.

Las personas que son negativas siempre se están comparando con el resto de personas. Tienen la fijación de hacer esa comparación entre ellos y los demás por dos finalidades claras. Una es aumentar aún más la percepción negativa de ellos mismos, y otra criticar. Son un tipo de personas que les gusta fustigarse y centrarse en sus errores, por lo tanto al compararse con las personas de su entorno puede acentuar aún más sus fallos, y darse a si  mismo la razón cuando expresa lo incapaz que es. 

En otras ocasiones, las personas negativas utilizan la comparación para juzgar y criticar a quienes sí consiguen cosas, o hacen algo con su vida. Sus miserias personales salen a flote cuando alguien cercano consigue seguir con su vida, y consigue sus metas. Para esta persona lo ideal es que todo el mundo estuviera peor que él, ya que es incapaz de hacer nada para salir de ese abismo en el cual habita. De igual modo, cuando alguien de su alrededor cae en una desgracia personal, se alegran y se regodean en ellos. Se centran más en el fracaso de los demás que en los suyos propios. Eso les hace sentirse plenos y felices. Su negatividad es entendida por esta clase de personas como un modo de vivir, y todos deberíamos estar en ese abismo. Ese modo de ser, y su necesidad de compararse con los demás les hace ser personas infelices y miseras, sumergidas en un profundo dolor del cual no saben salir, y acaban por convertirse en la sombra de las personas que un día fue. Compararse con los demás es uno de los 5 rasgos más comunes de las personas negativas.

5-. No soportan las críticas.

Cuando nuestra autoestima es frágil y la seguridad hacia uno mismo es inexistente, todo lo que percibimos de los demás son ataques. Una persona negativa siempre se sentirá dolida porque siempre se sentirá atacada. Su percepción es que todo el mundo la juzga, la critica y le reprocha su comportamiento, o sus capacidades. Ello les lleva siempre a estar a la defensiva, e incluso a ponerse agresiva si alguien da una opinión acerca de ella. Suelen reaccionar de forma violenta porque creen que todo el mundo les ataca. En el fondo, conocen su problemática, y no quieren que nadie se la recuerde, y es por eso su postura defensiva ante cualquier crítica u opinión de los demás.

Si cada logro de los demás es una ofensa para esta clase de personas, que alguien las critique o les dé su opinión respecto a ellas, será algo que no podrán soportar. Su pobre percepción de si mismos hace que crean que los demás también opinan lo mismo, y es algo que les hace mucho daño, y es por ello que reaccionan de un modo agresivo cuando se ven juzgados o criticados. También decir que, debido a su percepción negativa de ellos mismos les empuja a evitar analizarse, y de ese modo pierden la oportunidad de identificar qué les ocurre, y buscar la ayuda que necesitan para cambiar todo lo que les hace daño. Por ese motivo, son personas vulnerables, que sufren y no son capaces de alcanzar su felicidad. El abismo en el cual habitan es tan grande que para ellos es imposible salir de él sin ayuda.

Cómo actuar ante las personas negativas

Si eres una persona vencida por la negatividad y te has reconocido en los 5 rasgos más comunes de las personas negativas, decirte que busques ayuda profesional, puedes cambiar tu modo de percibirte y percibir el mundo que te rodea. No tienes por qué vivir siempre sumergido en la más profunda oscuridad. Puedes dejar de percibir y percibirte negativamente y poder ver la luz que tanto necesitas.

Tenemos que comprender que las personas negativas son personas que sufren, y que son incapaces de ser felices. Pero no son así porque ellos quieren, sino porque no saben ser de otra forma. Y es por ello que necesitan de toda la ayuda que puedan recibir, pero eso no significa que debemos caer en su pozo de amargura personal. Podemos ayudarles pero sin caer en su negatividad. No lo podemos permitir, y para ello es necesario ponerle nuestros límites. Tenemos que dejarle claro que no vamos a soportar su comportamiento, y si lo respeta estaremos a su lado, pero si sigue con su actitud deberemos alejarnos de ellos. Es importante ayudarles, pero también lo es cuidarnos a nosotros mismos. ¡Adelante!

Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online

Scroll al inicio