Mi pareja antepone a su familia
Es cierto que la relación con nuestra familia es importante. Incluso podemos llegar a conocer a una persona por cómo trata a su familia. Pero hay personas que tienen tal apego con sus familiares que son capaces de anteponerlos a todo y a todos. Cuando alguien tiene que elegir constantemente entre algo y otra cosa es porque algo no funciona. Por ejemplo, la familia y nuestra relación deben coexistir, ya que cada uno al final vive su propia vida, y se relaciona con quien quiere y cómo quiere. Así que si afirmas eso de que “mi pareja antepone a su familia”, es porque hay un problema latente que debe ser tratado por el bien de vuestra relación.
Para todos es realmente doloroso verse como el segundo plato de quien amamos. Lógicamente, una pareja debe tener siempre relación con la familia de la otra persona, pero verse apartada cuando la familia le requiere, es algo realmente traumático que puede acabar por destruir la propia relación de pareja.
Una relación debe fundamentarse a través del cariño, del amor, del respeto y del hecho de compartirlo todo. Además, toda relación requiere de cierta intimidad, y de compromiso mutuo. Una relación cuya familia está envuelta siempre, y se convierte en un tercer componente de esa relación, todo acaba por deteriorarse. Una pareja siempre debe conformarla dos personas, toda persona que se incluya en ella será un foco de disputas y problemas.
Si además, tu pareja prefiere a su familia y es capaz de dejarte de lado, debes tomar algún tipo de decisión, y comunicarte con tu pareja. No puedes permitir que nadie te haga sentir que eres un segundo plato. Porque no te has comprometido con su familia, te has comprometido con tu pareja, así que no permitas que nadie te arrastre con su comportamiento tóxico con su familia. Si dices que “mi pareja antepone a su familia” es porque hay un problema que hacer frente, y no rehuirlo, porque solo te aportará dolor y sufrimiento, y con el tiempo, tu relación de pareja puede finalizar de un modo muy traumático. En este artículo veremos cómo debemos actuar cuando nuestra pareja prefiere su familia.
Cuando su familia es más importante que tú
Existen familias cuyos apegos son realmente fuertes, y se necesitan constantemente. Ello no suele afectar a nadie, solamente a ellos mismos. Pero cuando alguien perteneciente a esa familia inicia una relación, esos lazos no se romperán nunca, y se verá eternamente en la posición de dejar a su pareja en un segundo plano para poder estar con esa familia que tanto necesita.
Cuando iniciamos una relación sabemos que esa persona siempre tendrá una familia detrás, y debemos aceptarlo. Pero cuando esa familia, o algunos miembros de ella, se meten constantemente en la relación y en su funcionamiento, esa relación acabará por destruirse por completo.
Tenemos que entender que la familia jamás es la culpable de meterse en una relación, y hacer que tu pareja los elija a ellos antes que a ti. El único responsable es tu pareja que permite ese tipo de conductas, y es incapaz de separar su relación de pareja con su familia. Quizás lo haga sin querer, o quizás sea porque ha interiorizado una relación tóxica con fu familia, que ha sido así desde siempre. Sea como sea, debe ser tu pareja quien actúe y trate el problema de apegos y dependencias que pueda tener son su familia, y dejar de decir aquello tan doloroso para ti como es afirmar que “mi pareja antepone a su familia”.
Si tu pareja te quiere y quiere apostar por vuestra relación, deberá dejar de incluir a su familia en vuestra relación. Cuando la prioridad de tu pareja es su familia, debes replantearte tu relación con tu pareja. Nadie merece que sea el segundo plato, ni que tenga que verse desplazada. Si es así, lo mejor sería dar por finalizada la relación, porque aunque pongas todo de tu parte, tu pareja siempre defenderá a su familia, y te verá a ti como el auténtico problema. No lo permitas nunca.
Cómo actuar cuando mi pareja prefiere a su familia
Es muy complicado hacer ver a tu pareja que vuestra relación no funciona porque siempre prefiera a su familia que a ti. Su conducta está arraigada desde su infancia, ya que se ha criado dentro de un núcleo familiar donde los apegos son muy fuertes y tóxicos. Cambiar eso es realmente difícil, y requiere que tu pareja ponga todo de su parte para revertir esa situación y poner a salvo vuestra relación. Aun así, hay cosas que puedes hacer para que tu pareja reaccione, y revise sus prioridades. Para ello debes:
- Establecer tus límites. Es esencial que tu pareja entienda y sepa hasta donde puede llegar contigo y hasta donde no. Debes decirle claramente que quieres y que no quieres en vuestra relación. Para ello es necesario un lenguaje asertivo y claro. Busca un lugar y un momento en el cual estéis los dos solos y cómodos. Y en un tono neutro y claro debes expresar aquello que te está atormentando, y qué deseas para vuestra relación. Debes también dejarle claro que si no respeta tus reglas, tendrás que tomar alguna decisión. Y una vez que hayáis hablado, tienes que hacer respetar esos límites. Es importante también que escuches a tu pareja, y sepas qué quiere. De ese modo podrás saber cómo actuar.
- Busca ayuda profesional. Para que tu pareja cambie tu modo de comportarse y percibir a su familia, es imprescindible que tenga ayuda psicológica. La terapia es el único camino para garantizar esos cambios, y tener relaciones más sanas y constructivas con su familia, y contigo. Si vuestra relación está muy deteriorada, también podríais optar por la terapia de pareja. Os ayudará a fortalecer vuestra unión, y que vuestra relación tenga unos pilares tan sólidos que nadie ni nada los haga tambalear.
- Fijar momento solo para vosotros. Es importante para una pareja tener momentos solo para los dos. La intimidad hace que los lazos sentimentales que os unen sean más fuertes. Así que, es importante que tengáis esos momentos en los que solo estéis los dos, para disfrutar el uno con el otro, sin que nadie más esté ahí.
- Refuerza la comunicación. Tener una comunicación fluida y libre en una pareja es algo esencial para la salud de la misma. Propicia la comunicación expresándole a tu pareja todo aquello que quieras, y escúchale también a él. Una buena comunicación garantiza el buen funcionamiento de una pareja.
- Busca actividades para ambos. Igual que tener intimidad, es importante que podáis compartir ciertas actividades que os guste, y os ayude a fortalecer vuestros lazos afectivos. Por ejemplo, podéis ir a clases de baile, a un taller de teatro, o simplemente caminar juntos algunos días en semana. Todo es válido si os aporta momentos que compartir.
Si aplicas todas estas recomendaciones y, aun así, afirmas aquello que “mi pareja antepone a su familia”, entonces deberías replantearte tu relación, y tomar las decisiones que tengas que tomar. Quizás en ese momento tendrás que pensar y centrarte en ti. Si una relación te hace sufrir y te causa dolor, tal vez sea mejor que cada uno siga por su camino. Pero eso ya deberías decidirlo tú. ¡Adelante!
Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online