
💬 “Poner límites a las personas controladoras no es egoísmo, es amor propio: es elegir la paz antes que el miedo, y la libertad antes que la culpa.” – Psicólogo Emocional Online 🌿
Las relaciones pueden ser una fuente de apoyo y amor en la mayoría de las ocasiones. Pero a veces, puede transformarse en una auténtica lucha de poder. Cuando alguien quiere controlarte a toda costa, esa relación deja de ser un espacio seguro, y se convierte en una experiencia desgastante y confusa. En este artículo veremos el daño que produce el control, identificaremos sus señales, y aprenderemos a afrontarlo del modo más efectivo. Si sientes que alguien quiere ejercer su control sobre ti, acompáñame a descubrir qué hacer si te quieren controlar. Porque es necesario saber cómo poner límites a personas controladoras.
El control como herramienta de sumisión
El control no suele presentarse de un modo directo, normalmente suele ejercerse de un modo lento y sutil. A menudo se puede esconder bajo la apariencia de una preocupación, de cuidados o incluso de amor, y ello hace muy difícil poder identificar ese control. Quienes intentan controlar a los demás, lo hacen para imponer sus propias voluntades, y cubrir sus necesidades. Anteponen sus propias exigencias y deseos, y no les importa lo más mínimo el dolor que puedan hacer a los demás. Es por ese motivo que debemos aprender cómo poner límites a personas controladoras.
El control puede darse en cualquier tipo de relación, pudiendo ser amistosa, laboral, familiar o de pareja. Este tipo de conductas busca limitar la autonomía y libertad de la otra persona, favoreciendo las relaciones basadas en la dependencia. Lo más peligroso de este tipo de dinámicas, es que las víctimas la final crean que necesitan ese control para poder afrontar su día a día.
El acto de controlar a alguien no solo implica una manipulación emocional, sino que también busca disminuir la autoestima y la capacidad de decisión de la persona afectada. Quien controla, ejerce poder de manera persistente y busca moldear los pensamientos, emociones y acciones de la otra persona para que encajen en sus propios deseos o inseguridades. Por eso es tan importante saber cómo poner límites a personas controladoras.
Cómo son las personas controladoras
El control tiene siempre un componente violento. Quien busca controlar a otra persona, lo hace para dominarla, y supeditar todo lo que hace, y con quien se relaciona. Es un modo de maltrato muy común, y alguna vez incluso socialmente aceptado. Lo cierto es que la persona que acepta ese control, está abandonando todo lo que es, porque dejar de ser alguien para convertirse en el objeto de alguien, y eso es algo realmente peligroso. Por todo ello, es esencial que aprendas cómo poner límites a personas controladoras.
Las personas que están siendo controladas por alguien, normalmente se sienten atacadas. No olvidemos que intentar controlar a alguien, significa ejercer una violencia silenciosa sobre ella, vulnerando factores tan importantes como la libertad, o la voluntad de la otra persona. Quien controla a otra persona es porque no la quiere, sino porque cree que es de su propiedad, y eso es algo tremendamente peligroso.
Quien tiene la necesidad de controlar a los demás, no tiene en cuenta sus derechos, ni respeta su intimidad, o su capacidad de decisión. En ese punto, la otra persona pasa a ser una simple propiedad para él y, por tanto, si contempla un atisbo de resistencia o una negativa, puede volverse realmente violenta. Es decir, el control siempre nos lleva a la violencia, y eso es algo que debemos tener en cuenta.
Ese control patológico podemos encontrarlo en muchos ambientes de nuestra vida. Quizás un compañero o un superior en nuestro puesto de trabajo intente controlarnos, o un amigo, o nuestra pareja, o quizás pueda ser familiar. Encontraremos siempre a alguien que quiera controlarnos, porque ese control le proporciona algo de alivio, ya que necesita que nada escape de todo lo que tiene dispuesto. Tenemos que aprender cómo poner límites a personas controladoras.
Diferencias entre una persona controladora y una persona posesiva
| Persona controladora | Persona posesiva |
|---|---|
| Busca dirigir y manejar aspectos de la vida de otros para mantener orden o seguridad, a menudo con intención de proteger o influir en decisiones. | Siente miedo de perder a la otra persona y busca retenerla a toda costa, frecuentemente con celos e inseguridad, limitando la libertad del otro. |
| Su comportamiento puede ser más racional y basado en la necesidad de control sobre situaciones y resultados, no necesariamente ligado a emociones profundas. | Sus acciones están motivadas por emociones intensas como el miedo, la ansiedad y los celos, con un fuerte componente emocional. |
| Puede ser vista como dominante o autoritaria, intentando imponer reglas o directrices para mantener el control. | Tiende a ser demandante afectivamente, con comportamientos celosos y a veces invasivos hacia el espacio personal. |
| Busca generalmente obtener resultados o mantener estabilidad, sin necesariamente atacar la autonomía del otro de forma emocional. | Su necesidad de posesión puede dañar la relación afectiva, generando dependencia y conflictos emocionales recurrentes. |
| Puede cambiar su actitud si reconoce que limitar la libertad afecta negativamente a sus relaciones y busca actuar con respeto. | Requiere trabajar en su autoestima y confianza para superar inseguridades y evitar conductas negativas en la relación. |
Señales de una persona controladora
Antes de nada, debemos tener en cuenta que las personas controladoras, nunca se muestran tal y como son, porque ello haría que las víctimas salieran huyendo. Por ese motivo, al principio se muestran afables y muy cariñosos. Lo hacen para conseguir la confianza de sus víctimas, y así bajen su guardia. Poco a poco irá ejerciendo su control, hasta tener a la otra persona bajo su dominio total. Podríamos decir que son personas muy sutiles a la hora de aplicar su manipulación, y sus estrategias de sometimiento.
Como son tan invisibles en un principio, debemos estar alerta ante ciertas señales que nos pueden indicar que la persona que tenemos al lado, es una persona tóxica que nos quiere controlar. Y entre dichas señales podemos encontrar:
- Son exigentes. Creerán que tú siempre debes estar dispuestos a hacer lo que ellos te pidan. Te pueden pedir favores, o simplemente directrices que esperan que cumplas. Si no accedes a ello, pueden volverse violentos.
- Te harán creer que son imprescindibles. Para poder controlarte, deben asegurarse primero que dudes de ti mismo, y después que los percibas como personas imprescindibles para ti. Es decir, que tu vida no tiene ningún sentido si ellos no están contigo.
- Utilizan la crítica y el reproche. Tienes que saber que una persona controladora lo es, cuando consigue destruir la autoestima de su víctima. Para ello, no dudará en emplear las críticas y el reproche para que dudes de ti, y de ese modo poder manipularte mejor.
- Se mostrarán dolidos. Y lo harán cada vez que les niegues algo que quieren. Ellos se creen con el derecho de que estés disponible para ellos siempre. Si le dices que no a algo, no dudarán en mostrarse totalmente heridos y dolidos.
- Usan la manipulación. Normalmente, para conseguir que accedas a todas sus exigencias, emplearán la manipulación. Suelen utilizar la culpa para que hagas todo lo que desean, Así que, te harán sentirte culpable por todo para manipularte.
- Son autoritarios. Se creen con el derecho de conseguir todo aquello que desean. Por ese motivo harán todo lo posible para que los demás accedan a sus voluntades. Si no lo hace, pueden utilizar el abuso y la violencia. Harán todo lo que sea por cumplir sus expectativas, sobre todo y sobre todos.
- Su estado emocional es inestable. En un mismo día pueden sentirse plenos y felices, como al cabo de un rato puede embargarle un sentimiento de rabia y tristeza. Al ser personas tan dependientes de los demás, subyugan su estado emocional y anímico a lo que hagan todas las personas que están a su alrededor.
- No soportan los cambios. El modo de ser de las personas controladoras suele ser extremadamente rígido. Su manera de pensar y actuar es rígida, y está sometida a su necesidad de controlar. El control les proporciona cierto alivio porque les permite no exponerse a la incertidumbre. Pueden padecer episodios de ansiedad si no consiguen el control de todo.
- Son personas mentirosas. No dudan nunca en utilizar la mentira para conseguir todo aquello que desean. Es otro modo de manipulación que tiene como objetivo controlar y someter mediante el engaño a los demás.
Las causas de que te quieran controlar
Antes de saber qué hacer si te quieren controlar, debemos conocer las causas de esa necesidad de control. Quienes necesitan controlar a los demás connota que padecen muchas inseguridades y miedos que les empuja a querer someter a otras personas. Y entre esos miedos encontramos el miedo al abandono, o a perder cierta sensación de poder que tienen, entre otros ejemplos. A continuación, repasaremos las causas más comunes de que alguien necesite controlar a los demás. Y entre ellas encontramos:
- Inseguridad personal: Aquellos que se sienten inseguros respecto a sí mismos pueden desarrollar la necesidad de controlar a los demás para evitar el rechazo o la pérdida de esa relación.
- Necesidad de poder: Para algunas personas, controlar a los demás les da una sensación de poder o superioridad. Este control puede sentirse necesario para mantener el dominio en la relación.
- Miedo al abandono: El temor profundo a quedarse solos o a perder a alguien importante puede llevar a una persona a intentar controlar cada aspecto de la vida del otro.
- Experiencias pasadas: Alguien que ha crecido en un entorno donde el control era común, podría repetir este patrón en sus relaciones adultas, creyendo que es una forma natural de vincularse.
- Celos: Los celos desmedidos son una causa frecuente de control, especialmente en las relaciones de pareja. El temor a ser traicionado o sustituido puede provocar comportamientos manipuladores y restrictivos. Por ello debemos aprender qué hacer si te quieren controlar.
Señales de que alguien te quiere controlar
Para saber qué hacer si te quieren controlar, debemos conocer las señales que nos pueden indicar que alguien está intentando controlarnos. Decir que identificar el control sobre nosotros nunca es sencillo, ya que quien lo ejerce lo hace poco a poco, sin alertar a las víctimas. Al principio puede padecer que esa persona nos cuida y se preocupa por nosotros, pero conforme pase el tiempo, comprobaremos que cada vez ejercerá un control más duro y exhaustivo. Y entre las señales que nos pueden ayudar a identificar el control de alguien sobre nosotros encontramos:
- Aislamiento social: Te alejan de tus amigos o familiares, haciendo que poco a poco te sientas más dependiente de esa persona. Pueden hacer comentarios como «Ellos no te entienden como yo» o «Te están influyendo negativamente».
- Críticas constantes: Te hacen sentir que todo lo que haces está mal o no es suficiente. Esta crítica puede disfrazarse de «consejo» o «preocupación», pero lo que busca es minar tu confianza.
- Supervisión excesiva: Revisan tus llamadas, mensajes o tus redes sociales. Quieren saber con quién hablas, a dónde vas y qué haces en cada momento.
- Manipulación emocional: Te hacen sentir culpable por cosas que no son tu responsabilidad, o utilizan tus emociones para que hagas lo que ellos desean.
- Control sobre tus decisiones: Te dicen qué hacer, cómo vestir, a quién ver o cómo gastar tu dinero, haciéndote sentir que no puedes tomar decisiones sin su aprobación.
- Castigo emocional: Si no haces lo que quieren, pueden retirarte su afecto, hacerte el «tratamiento del silencio» o generar conflictos innecesarios para presionarte.
La relación entre el miedo y el control
Las personas que no saben gestionar sus miedos, suelen necesitar tener el control de todo. Los cambios, y todo aquello que no pueden controlar, hacen que su estrés se eleve. Quienes padecen un nivel alto de estrés, suelen experimentar episodios de ansiedad si no pueden tener todo su ambiente bien controlado. Es por sus propios miedos, el motivo por el cual hay personas que necesitan controlar a los demás.
Pero lo que nadie puede hacer es proyectar sus miedos hacia los demás. Las víctimas de las personas controladoras suelen estar tan sometidas que su vida se centrará en hacer caso a todas sus peticiones. Una vida subyugada a los deseos de otra persona, y eso es algo muy peligroso para uno mismo. Por todo ello, debes aprender cómo poner límites a personas controladoras.
Uno de los pilares más importantes, del cual tiene que sustentarse cualquier relación, es la libertad. Si creemos que la otra persona es nuestra propiedad, la deshumanizamos, y nos llevará a tratarla como algo y no como alguien. El daño que pueden llegar a hacer las personas controladoras es muy elevado. Además, de que esta clase de personas sufrirán siempre que no logren controlar todo su entorno. Por ese motivo, pueden utilizar la manipulación, el chantaje o incluso el abuso, si no consiguen tenerlo todo controlado.

Cómo poner límites a personas controladoras
Si eres víctima de las conductas tóxicas de una persona controladora, debes saber que tienes que tomar alguna decisión al respecto. No puedes quedarte impasible, esperando que todo cambie, y que él cambie, porque no será así. Todo irá a peor, y el control que esa persona ejerza sobre ti, se volverá cada vez más intenso. Al final, si no actúas, quien intenta controlarte te hará daño, y eso es algo que puedes evitar. Para ello, aquí tienes una serie de recomendaciones. Y estas son:
- Apuesta por la comunicación. Antes de tomar cualquier decisión, deberías hablar con esa persona. Dile cómo te sientes. Y explícale que su control te hace daño, y no te deja ser tú mismo. Con ello, pídele ese cambio si quiere estar contigo. Debe de ser una conversación directa y sincera.
- Escúchale. Además de exponerle cómo te sientes, escucha lo que tenga que decirte. De ese modo podrás comprender qué le empuja a comportarse de ese modo. Toda la información que puedas tener será valiosa para saber cómo actuar.
- No te dejes manipular. Posiblemente, cuando le digas que no puede seguir con su conducta, intentará manipularte, y hacerte sentir mal por tu negativa. No lo permitas, tienes todo el derecho a blindar tu salud emocional, y a mirar por ti.
- Pon tus límites. No accedas a sus exigencias. Ponle freno, y déjale muy claro que hay límites que no puede traspasar. Tiene que ser unos límites muy firmes, y no dejes que se los salte. Es importante que tengas una actitud sólida.
- Deja a un lado la culpa. Quizás te sientas culpable, pero no dejes que esos sentimientos se apoderen de ti. Eres tu responsabilidad, y tienes que mirar por ti. Si alguien te hace daño con su control, tienes todo tu derecho a poner fin a eso.
Anímale a buscar ayuda. Si esa persona tiene la voluntad de mejorar, anímale a buscar ayuda psicológica. La terapia le ayudará a cambiar su modo de percibir el mundo que le rodea, y comportarse de un modo adecuado. Además, le ayudará a afrontar todos sus miedos, y de ese modo, alejar la necesidad de controlarlo todo.
Ahora que sabes cómo poner límites a personas controladoras, decirte que hagas todos los cambios que necesites. Apuesta por ti y por tu bienestar, y si la otra persona no quiere cambiar, y sigue controlándote, quizás deberías plantearte seguir o no con la relación. No debemos estar con personas que nos hagan daño, y nos resten. Tenemos que aprender a seleccionar a quienes nos aporten, y nos enriquezcan emocionalmente. Es algo que deberíamos tenerlo muy en cuenta.
Beneficios de la terapia online poner límites a una persona controladora
Si necesitas saber qué hacer si te quieren controlar, decirte que la terapia online puede ayudarte a sanar todas tus heridas, a recuperar tu autonomía, y a evitar que alguien te pueda llegar a controlar. Es esencial volver a recuperar nuestra autoestima, y fomentar nuestro amor propio. Para ello es necesaria la terapia. Y entre sus beneficios más comunes encontramos:
- Acceso desde cualquier lugar: No importa dónde estés, puedes acceder a la ayuda profesional que necesitas desde la comodidad de tu hogar.
- Privacidad y confidencialidad: La terapia online te permite hablar abiertamente sobre tu situación en un entorno seguro y confidencial.
- Flexibilidad horaria: Puedes elegir los horarios que mejor se adapten a tu rutina, sin la necesidad de desplazarte a una consulta física.
- Variedad de opciones: Hay una amplia gama de terapeutas especializados en relaciones tóxicas, control y dependencia emocional disponibles online.
- Mayor comodidad: Para muchas personas, la terapia online reduce el estrés de acudir físicamente a una consulta, lo que facilita el proceso de búsqueda de ayuda. Recuerda que es esencial qué hacer si te quieren controlar.
Preguntas frecuentes sobre poner límites a personas controladoras
Una persona controladora tiende a querer dirigir o manejar diferentes aspectos de la vida de los demás, buscando mantener seguridad, orden o influencia sobre situaciones o decisiones.
Incluyen intentar imponer reglas, tomar decisiones sin consultar, limitar la autonomía del otro, monitorear excesivamente y mostrar resistencia a perder el control.
Las razones pueden incluir inseguridades, miedo al caos o al fracaso, experiencias de vida previas, necesidad de tener todo bajo control para sentirse seguros o poder manejar la ansiedad.
El control excesivo puede generar frustración, resentimiento, pérdida de autonomía y confianza, así como problemas de comunicación y eventual distanciamiento en la relación.
Es fundamental trabajar en la autoconciencia, identificar las causas del control, practicar la confianza en los demás, mejorar la comunicación y, en algunos casos, buscar apoyo profesional.
Establecer límites claros, comunicar de manera asertiva, no ceder a manipulaciones y fomentar el diálogo abierto contribuye a mantener relaciones saludables y respetuosas.
Cómo poner límites a parejas controladoras
Hay parejas sustentadas bajo la desconfianza y la necesidad de control. Emociones tan negativas como el miedo, la ira, o la inseguridad siempre surge por al menos una de las partes de esta clase de relaciones. Cuando una persona necesita controlar a la otra, la relación se vuelve en algo muy tóxico capaz de destruir por completo a la propia unión, como a las personas que la conforman. Por ese motivo, si te preguntas “qué hacer si mi pareja me controla”, es porque ese control es tan fuerte e intenso que te está ahogando emocionalmente por completo.
Cuando en una relación se establece la necesidad de controlar a la persona que se ama y se quiere, ello deteriora por completo la relación. Toda persona que se sienta controlada y coaccionada al final acaba por alejarse de quien ejerce ese control. El amor es respeto y libertad.
Todo lo que sea la privación de nuestra libertad, es algo que nos generará un gran sufrimiento y dolor, incluso también para la persona que necesita tenerlo todo bajo control, porque será tan alto su inseguridad, y el intenso nivel de estrés que padecerá, que acabará por sufrir ciertos trastornos como la ansiedad. Por ese motivo, si te preguntas “qué hacer si mi pareja me controla”, decirte que antes de todo, debes poner límites.
Conclusiones sobre cómo poner límites a personas controladoras
Que alguien quiera controlarlos para retenernos a su lado, y poder utilizarnos a su conveniencia, es un problema serio que puede afectarnos gravemente en nuestra salud emocional y mental. Si te encuentras en esa situación, donde alguien te está controlando todos los aspectos de tu vida, y te impide ser una persona con autonomía propia, es esencial que aprendas a saber cómo poner límites a personas controladoras. Para ello, tienes que reconocer las señales y tomar las medidas necesarias para poder protegerte.
Si quieres saber qué hacer si te quieren controlar, decirte que es esencial que comiences a establecer límites, buscar apoyo en tus seres queridos y cercanos, y apostar por la ayuda psicológica. Estos aspectos son claves para recuperar tu autonomía y bienestar emocional. Recuerda lo importante que es tener relaciones basadas en la libertad, el respeto y el cariño. No merece la pena estar al lado de alguien que pueda hacerte tanto daño. Así que, apuesta por ti, y apuesta por la terapia.
Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online
Sobre Daniel Molina
Soy Daniel Molina (n.º colegiado: 20237), Psicólogo Clínico especialista en Terapia Online con más de 12 años de experiencia.
