
💬 “Saber cómo afrontar la gordofobia es recordar que tu valor no está en tu talla, sino en la historia que llevas dentro.” – Psicólogo Emocional Online 🌿
En la sociedad actual, donde el aspecto físico es una prioridad, quienes no entran dentro de los cánones de belleza impuestos socialmente, pueden ser atacados y violentados con mucha facilidad. Es el orden de la importancia del plano físico. Las personas con sobrepeso, suelen ser víctimas del repudio social, por cómo son. Por ese motivo, tenemos que comprender cómo afrontar la gordofobia.
Entender cómo afrontar la gordofobia es primordial para comprender el daño que hacen los prejuicios, las críticas y los reproches. Somos quienes somos, y aunque podamos mejorar en algunos aspectos, es decisión nuestra. Todos tenemos espejos en casa, y sabemos cómo somos, y nadie debería opinar acerca de nuestro aspecto físico. Nadie debería tener la libertad de hacerle daño a otra persona.
Qué es la gordofobia
Podríamos definir la gordofobia como el miedo o el rechazo a las personas que sufren de sobrepeso u obesidad. El miedo es el principal factor a la hora de odiar a aquello que tememos, llegando a rechazar o evitar exponernos a lo que nos paraliza y nos produce temor. Pero no debemos olvidar, que en este caso no se trata de tener miedo hacia una cosa o situación, sino hacia un colectivo de personas. El dolor que produce la gordofobia es terrible.
Personas que sienten y tienen sus propias batallas que librar. Y es entonces donde ese miedo se transforma en un auténtico odio que puede destruir por completo a las personas a quien va dirigido. Las personas con esta fobia, son incapaces de comprender cómo afrontar la gordofobia.
Las personas que rechazan a las demás, simplemente por su estado físico, o por su constitución corporal, lo hacen porque están dentro de los cánones que socialmente se aceptan como sanos y bellos. Rechazan a los demás bajo su postura aventajada, donde nunca han sufrido ese tipo de rechazo, violencia, o incluso abusos.
Cuando uno está en una posición aventajada, puede convertirse en un auténtico juez y verdugo contra aquellos que no son como ellos. Este hecho es peligroso, porque es el primer paso para alimentar el odio, y dar luz verde al acoso, y al ataque gratuito. El dolor que produce la gordofobia es terrible y devastador.
Quizás sería bueno recordar que el sobrepeso no es una enfermedad. Es más, hoy en día, aún la comunidad médica y científica está evaluando este hecho. La obesidad es en muchos casos la causa de factores que no tienen que ver con la comida, sino con heridas emocionales y psicológicas que no han sido tratadas adecuadamente.
Quien come de manera descontrolada, no lo hace por apetito, ni porque quiere, sino porque eso le alivia su dolor emocional. Y es algo que debemos tener muy en cuenta. Así que, las personas capaces de emitir juicios y opiniones acerca de los demás, deberían al menos tomarse la molestia de averiguar la historia de esa persona, así como el dolor que ha tenido que soportar, y todas las batallas que está librando, sobre todo consigo mismo. Es auténticamente devastador el dolor que produce la gordofobia.
La gordofobia solamente es la expresión de quien se siente superior solamente porque ha tenido el privilegio de no atravesar malos momentos, ni de haber sufrido problemas tan grandes que su estado emocional y psicológico se ha dañado para siempre.
Su ignorancia es capaz de soltar sus críticas alegremente, sin tener en cuenta el dolor que producen, y de que sus palabras pueden destruir aún más a quien ya sufre un gran pesar. Son personas ignorantes, y esa ignorancia les hace realmente malévolas. Las personas gordofóbicas deberían reflexionar un poco más acerca de sus valores. Realmente, el dolor que produce la gordofobia es terrible.
Diferencias entre gordofobia y violencia estética
| Gordofobia | Violencia estética |
|---|---|
| Específica discriminación, rechazo, estigma y maltrato hacia personas con cuerpos grandes o gordos, por el mero hecho de serlo. | Se refiere a la presión social y a todas las formas de violencia que surgen de la imposición de un ideal de belleza único, cánones estéticos y exigencias sociales respecto al aspecto físico. |
| Su objetivo es la exclusión de cuerpos gordos del ideal de belleza, resultando en burla, discriminación laboral/sanitaria, acoso, y presión para adelgazar. | Engloba no solo la gordofobia sino también la discriminación hacia otras corporalidades “no normativas” (edad, color de piel, discapacidad, cicatrices, etc.), promovida por los medios, la moda y la cultura. |
| Es una forma concreta y muy extendida de violencia estética, pero centrada únicamente en el peso y la figura corporal. | Opera a nivel estructural y psicológico: presión para ser joven, delgado/a, bello/a según patrones hegemónicos; afecta la autoestima y salud mental de mujeres y hombres. |
| Las víctimas directas son personas gordas, aunque los mensajes gordofóbicos afectan a toda la sociedad. | Puede afectar a todas las personas que no cumplen los estándares sociales, generando inseguridad, frustración, baja autoestima y prácticas peligrosas para buscar aceptación. |
| Disfrazada a veces como “preocupación por la salud”, pero basada en prejuicio, moralización y marginación. | Es estructural y cultural: las instituciones, publicidad y redes refuerzan los modelos inalcanzables de belleza y sus consecuencias negativas. |
Cómo son las personas Gordofóbicas
Todas las personas que padecen odio o rechazo hacia cualquier persona, tienen unos rasgos muy diferenciados y comunes en todas ellas. Una persona normal y sana, jamás atacaría a otra persona de forma gratuita, aún más, una persona empática, jamás odiaría a los demás porque sí, ni tan siquiera por aspectos tales como, su condición física, su aspecto, tu tono de piel, o por su religión, entre otros. No podemos obviar que el dolor que produce la gordofobia es terrible.
Quien odia es porque es una persona vacía que busca machacar a los demás para sentirse aliviados de lo que realmente son. Y entre dichas características de las personas gordofóbicas encontramos:
- Personalidad narcisista. Son personas que solamente miran por ellas. Quieren ser el centro de atención, y de que se hable de ellas, y de sus logros. No soportan que nadie les haga sombra.
- Baja autoestima. Quienes atacan a los demás, en el fondo no quieren ser atacados. Saben que tienen mil defectos, e intentan esconderlos atacando las diferencias de los demás. Solamente así consiguen sentirse superiores. Pero en el fondo saben de todas sus carencias.
- Inmadurez emocional. Las personas gordofóbicas no son personas maduras. Las personas emocionalmente maduras no se centran en los demás, ni en sus defectos. Simplemente, intentan centrarse en sus vidas. Por ello, podemos afirmar que las personas que odian, son personas totalmente infantiles y vacías.
- No son empáticas. Esta clase de personas son incapaz de ponerse en el lugar de los demás. No tienen en cuenta los sentimientos y las emociones de los demás. Por ese motivo atacan sin compasión. Creen que sus actos están respaldados por una escala de valores que solamente ellas siguen.
- No soportan la frustración. Piensan que el mundo y las personas tienen que ser como ellas consideran que deberían ser. Por ello, se sienten con la autoridad de imponer su voluntad, aunque tengan que recurrir al insulto, la manipulación o el abuso.
- Son violentas. Quien es capaz de odiar, de dar paso al rencor, o tener ese grado de rabia incontrolada hacia los demás, puede dar paso a una violencia extrema, tanto física como psicológica.
Las trampas que esconde la gordofobia
Todas aquellas personas que consideran que tener sobrepeso u obesidad es sinónimo de estar enfermo, siento decirles que eso no es ni de lejos algo cierto. Tener una constitución gruesa no quiere decir que esa persona padece ciertas alteraciones, como padecer azúcar en sangre, o colesterol. Cualquier persona, independientemente de su estado físico, puede llegar a padecer cualquier enfermedad o alteración. Es terrible el dolor que produce la gordofobia. Debemos saber y aprender cómo afrontar la gordofobia.
Así que, juzgar a una persona por su peso, es discriminatorio y esconde una falta total de conocimiento y valores. Una persona delgada puede tener los mismos problemas médicos que una persona que tiene sobrepeso, y viceversa. Así que, es un argumento que solamente justifica las opiniones y críticas de quien es capaz de odiar.
Tener sobrepeso es un factor de riesgo, pero también lo es fumar o beber alcohol. Pero las personas que son gordofóbicas nunca atacarán a esos colectivos. Su odio va más allá de rechazar a quien está en riesgo, para su salud, sino que está dirigido a quien cree que es inferior a ellas, y merecen ser castigados. Pero el dolor que produce la gordofobia es terrible.
La gordofobia piense a verdaderos monstruos capaces de destruir con compasión a aquellas personas que sufren sobrepeso, sin tener el mínimo remordimiento, porque se rigen por su propia escala de valores.
Lo más colosal de la gordofobia, es que esas personas que profieren su odio, creen que con sus ataques ayudan a los demás, y las personas con sobrepeso van a tener en cuenta sus críticas. Como son personas inmaduras y nada empáticas, no son capaces de suponer que con sus ataques y su odio solamente harán daño.
Toda persona con sobrepeso tiene espejos. Saben perfectamente cómo son. Nadie tiene que recordárselo, ni machacarles. Si de verdad quisieran ayudarles, estarían a su lado. Les apoyarían, y les animarían a buscar ayuda si quieren ser ayudadas. Recordemos que el sobrepeso no tiene que ver con la comida, sino con el plano psicológico y emocional. Y el dolor que produce la gordofobia es terrible y devastador para quien lo sufre.
Una persona que sufra sobrepeso, es una persona herida que necesita una ayuda cualificada. No necesita que nadie le recuerde cómo es un cuerpo, ni le ataque, ni le destruya como hacen estos mensajeros del odio. El dolor que produce la gordofobia puede ser realmente devastador.
Causas de la gordofobia
Ahora que comprendemos mejor qué es y cómo afrontar la gordofobia, tenemos que entender sus causas. Estas pueden originarse desde las influencias culturales, hasta las experiencias personales. A continuación, veremos algunas de las causas más comunes de este tipo de violencia. Y estas son:
- Estándares de belleza impuestos. Existen unos cánones de belleza socialmente establecida. Se sujetan en un ideal de belleza asociado con la extrema delgadez. La persecución de este ideal, promovida por todos, se convierte en una prioridad, rechazando a toda persona alejada dentro de estos estándares físicos de belleza.
- Mitos sobre la salud. Todos asociamos culturalmente y socialmente a que un peso bajo es igual a una buena salud, cuando sabemos que no es así. Esas percepciones negativas sobre el peso pueden originar actos de gordofobia, y de violencia estética.
- Influencia social y cultural. Sufrir los comentarios despectivos, y juicios acerca de nuestro físico, por parte de amigos y familiares, además de ciertos medios de comunicación, harán que personas que no tienen un cuerpo considerado como normativo sufran el rechazo de los demás.
- Autopercepción distorsionada. Muchísimas personas internalizan la discriminación que sufren por no tener un físico considerado normativo. Esto hace que se perciban a sí mismas como personas poco válidas o incapaces, reforzando sentimientos negativos hacia ellos mismos.
Consecuencias psicológicas de la gordofobia
Si queremos saber en profundidad cómo afrontar la gordofobia, tenemos que comprender que tiene un impacto devastador en la salud mental y emocional de quienes sufren este tipo de violencia. Las personas que sufren el acoso, las críticas y burlas por su físico, suelen desarrollar las siguientes consecuencias psicológicas. Y estas son:
- Depresión. Tener esa sensación de vacío profundo e intenso por no encajar, o ser aceptados por los demás, puede generarnos un gran sentimiento de tristeza y desesperación que favorecerá que las víctimas de este tipo de violencia, puedan sufrir un cuadro depresivo grave.
- Aislamiento social. El miedo a ser juzgados y rechazados, puede llevar a las víctimas a evitar aquellas interacciones o eventos sociales, que puedan quedar expuestos a los prejuicios. Este hecho les llevará a tener la imperiosa necesidad de aislarse para no ser dañados.
- Estrés y ansiedad. Estar siempre en alerta ante posibles ataques, puede llevarnos a soportar una gran presión, y un gran nivel de estrés. Si estamos sufriendo ese nivel alto de angustia durante un tiempo determinado, puede favorecer la aparición de la temida ansiedad.
- Baja autoestima. Ahora que comprendemos mejor cómo afrontar la gordofobia, podemos entender que las víctimas de este tipo de violencia, pueden empezar a cuestionarse todo lo que son, y su propia valía, haciendo caso a los juicios de los demás. Su autoestima se verá totalmente dañada, y eso, limitará toda su vida, y el modo de percibirse a sí mismo.
El dolor que produce la gordofobia
Toda persona que sufre solamente necesita ayuda. Una ayuda sincera que requiere ponerse en su lugar, y ofrecer la mano para que pueda levantarse. La gordofobia solamente aprovecha que alguien que está fuera de los cánones físicos establecidos socialmente, para atacar, humillar y vejar. Nadie tiene el derecho a atacar a nadie, y si lo hacen deben ser reprendidos por todos sin pensarlo. Son personas que deberían ser amonestadas por todos.
Lo más curioso es que a veces se establecen una moralidad y una escala de valores totalmente distorsionadas, y muchas personas las siguen. Son incapaces de suponerse por ellas mismas, y de comprender que cada uno es como es, y nadie tiene el derecho a opinar sobre nadie, y mucho menos criticar o insultar. Debemos entender que el dolor que produce la gordofobia es terrible. Por ello es esencial saber cómo afrontar la gordofobia.
Ninguna persona con sobrepeso o que tenga cualquier otra característica física diferente al resto, tiene que ser increpada por nadie. En estos casos deberíamos aprender y asumir por completo eso de “trata a los demás como te gustaría que te tratasen”. Todo lo demás sobra. Hay que tener en cuenta cómo afrontar la gordofobia.
Si eres una persona gordofóbica, me gustaría que te pararas en este momento, y reflexionaras acerca de tu escala de valores y de tu moralidad, y del daño que estás haciendo con tus juicios y críticas. El odio te hace débil. Sé que lo haces para esconder tus propias carencias. Pero si quieres ser mejor, no tienes que superar a nadie, tienes que superarte a ti mismo. Si quieres realmente ayudar, ofrece tu mano, y no tus insultos.
Ten muy en cuenta el dolor que produce la gordofobia, y cómo con tus palabras puedes llegar a destruir a otra persona, y solamente por el simple hecho de creerte con la verdad suprema. Sé humilde, trátate bien, y de ese modo podrás tratar bien a los demás. Sana tus propias heridas.
El dolor que produce la gordofobia en los medios de comunicación
Como podemos comprobar nosotros mismos ojeando una revista o encendiendo el televisor, todas las personas que se muestran en estos medios de comunicación, son personas que entran dentro de un estereotipo bien marcado, y aceptado socialmente. Este hecho no es casual. El dolor que produce la gordofobia es terrible.
Todo aquel que es famoso es en sí una máquina de ganar dinero, y teniendo un físico aceptado por todos, será más fácil, por ejemplo, vender cualquier producto o vestimenta a todas las personas con las mismas características físicas. Es simplemente uno de los motivos por los que las personas que tienen un físico distinto no tienen cabida en los medios.
Desgraciadamente, una persona con una baja autoestima, no se cuida ni consume tanto como una persona que se siente bien consigo misma. Es una realidad que no podemos maquillar. Cierto es que debería ser al revés, y si no nos sentimos bien con quienes somos, deberíamos cuidarnos mucho más, y mimarnos.
Deberíamos comenzar a hablarnos y tratarnos bien a nosotros mismos. Esta realidad no pasa desapercibida para la publicidad. Por tanto, se centran en las grandes masas, capaces de consumir todo aquello que ven o escuchan en cualquier medio. Sin importarles el dolor que produce la gordofobia.
En los medios de comunicación, no hay espacio para el diferente, para el que escapa de un modo u otro de los cánones físicos y morales que ellos mismos marcan. Y esa diversidad que deberíamos todos asumir y aceptar, simplemente se diluye, estigmatizando aún más a esos colectivos que, por sus características, sean las que sean, son diferentes a aquello que socialmente se ha impuesto.
Es por ese motivo, que todo lo que sea distinto puede dar miedo e incluso rechazo. Por todos estos factores, pueden darse polémicas, como detallaré en el siguiente punto. Debemos entender que el dolor que produce la gordofobia es terrible y devastador para las víctimas de este tipo de odio y violencia.

💬 “La terapia online te ayuda a sanar las heridas de la gordofobia, recordándote que tu cuerpo merece respeto y tu mente, un espacio seguro para reconstruirse.” – Psicólogo Emocional Online 🌿
Cómo afrontar la gordofobia
Una vez que sabemos qué es la gordofobia, y el daño que puede llegar a hacer, debemos saber cómo afrontar la gordofobia. Debemos comprender que es un tipo de violencia, y ataca a personas que normalmente tienen que enfrentarse al juicio y críticas de los demás. Una persona con la autoestima dañada es la víctima perfecta para quienes son gordofóbicos, porque no saben cómo enfrentarse a ella. Para que todos podamos combatirla, debemos:
- Apostar por la educación y sensibilización. Es esencial que construyamos una conciencia social acerca de las consecuencias tan dañinas, a nivel emocional y psicológico, de la gordofobia. Este tipo de acciones ayuda siempre a reducir el estigma de no tener un cuerpo normativo y aceptado.
- Rechazo de estándares impuestos. Debemos ser conscientes de que cada uno es como es. Quizás pueda mejorar algunos aspectos, pero es una decisión personal, que nunca debe ser impuesta por nada ni por nadie. La diversidad corporal debe ser normalizada y respetada.
- Promoción de la autoestima. Tenemos que aprender que a las personas se les valora por cómo son, y cómo se comportan con los demás, no por su estado físico. Debemos aprender a ser más amables con los demás y con nosotros mismos. Apostar por la autoestima, y aceptarnos tal y como somos, debería ser una prioridad.
- Terapia psicológica. Quienes son víctimas de la gordofobia, deberían tener ayuda terapéutica para sanar las heridas que produce el rechazo, las burlas y las críticas. También la terapia le puede ofrecer herramientas efectivas para mejorar su autoestima, y aceptarse tal y como es.
Beneficios de la terapia online para afrontar la gordofobia
Al saber cómo afrontar la gordofobia, decir que la terapia online ofrece varios beneficios significativos para quienes buscan apoyo en temas relacionados con la gordofobia. A continuación se presentan algunas de las ventajas más destacadas:
- Accesibilidad Geográfica: La terapia online rompe las barreras de distancia, permitiendo que personas en zonas rurales o con movilidad limitada accedan a la ayuda psicológica que necesitan desde cualquier lugar con conexión a internet.
- Comodidad y Flexibilidad: Esta modalidad facilita que el paciente elija horarios de acuerdo a sus rutinas, lo cual puede ser particularmente útil para quienes enfrentan ansiedad o incomodidad al exponerse a un entorno físico de consulta.
- Confidencialidad y Privacidad: Para quienes experimentan estigmas sociales, la terapia online permite mantener una mayor privacidad, evitando encuentros incómodos y promoviendo un espacio seguro para hablar abiertamente de su experiencia con la gordofobia.
- Reducción de costos: La terapia online a menudo representa un ahorro, tanto en desplazamientos como en honorarios, lo cual facilita el acceso a servicios de salud mental de manera económica y sostenible.
Preguntas frecuentes sobre cómo afrontar la gordofobia
Es el rechazo, discriminación y estigmatización hacia las personas con cuerpos grandes o gordos, basada en prejuicios sociales y estándares de belleza limitantes.
Genera baja autoestima, ansiedad, depresión, aislamiento social y estrés, afectando profundamente la calidad de vida y el bienestar emocional de quienes la padecen.
Buscar redes de apoyo y comunidades inclusivas, practicar el autocuidado y la autoaceptación, denunciar situaciones de discriminación y educar para romper estereotipos.
Porque fortalece la autoestima y genera resistencia frente a críticas externas, ayudando a mantener una buena salud psicológica y un sentido de identidad saludable.
Documentando los incidentes, buscando apoyo legal o institucional, y utilizando canales legales o sociales para exigir respeto y protección contra la discriminación.
Existen organizaciones, grupos de apoyo, psicólogos especializados en identidad corporal y movimientos sociales que promueven la inclusión y el respeto a la diversidad corporal.
La gordofobia en la inclusión de cuerpos no normativos
Recientemente, hemos vivido una polémica debido al uso por parte de una empresa de ropa deportiva y bañadores de una modelo que por sus medidas no entra dentro de un cuerpo normativo. Una presentadora de televisión abría un debate sobre si, al publicitar esta empresa sus productos con esta modelo, estaba haciendo apología de la obesidad. En esta campaña aparecen varias modelos en bikini, y de la única que se cuestiona su estado de salud es de la que tiene talla grande.
Simplemente, por su aspecto físico, se dio por sentado que era una persona obesa, y que podía tener graves problemas de salud, como accidentes cardiovasculares, diabetes, etc. Esto es un ejemplo de los prejuicios, porque con que hubiese investigado o se hubiese interesado, hubiese sabido que esa modelo.
A la que señala por su tamaño, surfea desde niña, incluso llegando a competir, por lo que como mínimo sigue un estilo de vida activo, lo que no cuadra mucho con el sedentarismo que se “supone” de una persona obesa. Se tuvo la osadía de hacer juicios sobre alguien que no conoce, y sus palabras solamente mostraron el odio, y el rechazo que tienen muchas personas sobre las personas que pueden ser diferentes.
Recordemos que las opiniones que quieren hacer daño, no son opiniones, son críticas. Y el dolor que produce la gordofobia es terrible. Una publicidad inclusiva no es apología de nada, simplemente es normalizar que hay diferentes tallas, diferentes cuerpos. No está diciendo, has de ser como yo, y máxime cuando el ideal de belleza actual está tan alejado al de una persona gorda.
Conclusiones sobre cómo afrontar la gordofobia
Una de las reglas máximas que todos deberíamos seguir es aquella que rige aquello de: “trata a los demás como te gustaría que te tratasen”. Nadie tiene el derecho de juzgar, criticar o abusar de otra persona. En este caso es el aspecto físico, pero el odio siempre se extiende y acabará por afectar de algún modo a cualquier colectivo que en ese momento esté en el punto de mira de todos, y sobre todo de los medios de comunicación. El odio no puede tener cabida en nuestras vidas. El dolor que produce la gordofobia es terrible, y es algo que debemos comprender.
El dolor que produce la gordofobia es inmenso. Lo simple es pensar y juzgar que una persona con sobrepeso es una persona indigna, que no sabe controlarse y come compulsivamente, y además es un ejemplo de malos hábitos y de mala salud. Prejuicios que solamente buscan atacar a un colectivo emocionalmente débil para sentirse bien.
No hay nada más gratificante para los mediocres que atacar a los demás para que nadie les ataque a ellos. Todos tenemos defectos o cosas que mejorar, pero también tenemos miles de virtudes. Quizás sería bueno que todos nos centraremos en lo bueno, y en las personas buenas, y dejáramos a un lado a todos aquellos que buscan hacer daño. Si les quitamos la atención, les quitamos el poder.
Quien sufre de sobrepeso no necesita que le recordemos hacer dieta o ejercicio. Recuerda que todos tenemos espejos. Si quieres ayudar, simplemente quédate a su lado y escúchale. Te darás cuenta de que no es un problema con la comida, sino con ellos mismos, por cómo se sienten y se perciben. Quien come en exceso o inadecuadamente no lo hace por apetito, sino por una necesidad emocional. Gracias a la comida encuentran un cierto alivio momentáneo para esas heridas emocionales que no han sido tratadas. Es importante comprender cómo afrontar la gordofobia.
Así que, el papel de un endocrinólogo y de un nutricionista puede ser esencial en estos casos, pero lo es mucho más la ayuda psicológica y el apoyo social. Si tienes heridas que sanar, busca ayuda profesional, y rodéate de todas esas personas que suman. No te centres en aquellas que solamente buscan hacer daño y alimentar su odio. No dejes que ese ruido silencie tu propia voz. Y especialmente, te aconsejo que comiences a hablarte bien y con respeto. Debes de ser la principal promotora de ti misma. Sé tu todo. ¡Adelante!
Noelia Rodríguez, y Daniel Molina (Psicólogo Emocional Online)
Sobre Daniel Molina
Soy Daniel Molina (n.º colegiado: 20237), Psicólogo Clínico especialista en Terapia Online con más de 12 años de experiencia.


