Cómo liberarse de las personas tóxicas

Las huellas de las personas tóxicas

Todos en algún momento de nuestras vidas nos hemos visto en compañía de personas que nos han hecho daño. Son personas que anteponen sus propios intereses a todo y a todos. No les importa lo más mínimo hacer daño a los demás, lo único que tienen en cuenta es conseguir aquello que desean, y eso siempre es peligroso para quien se convierte en sus víctimas. Por ese motivo es esencial que aprendamos cómo liberarse de las personas tóxicas.

Caer en las redes de este tipo de personas es fácil, ya que son personas hábiles a la hora de manipular a sus víctimas, y someterlas para conseguir todo lo que desean. Suelen fijarse en personas bondadosas y empáticas. Es entonces donde se muestran encantadoras hasta conseguir la confianza de sus víctimas. Una vez que consiguen que su víctima confíen en ellos, comienzan a replegar todo su abanico de técnicas para conseguir de ella aquello que quieren. Pueden utilizar al chantaje, la manipulación emocional, o incluso el abuso, entre otras. Hará todo lo que sea para alcanzar sus metas, sin importarle el daño que puedan hacer.

Las huellas que dejan detrás de si las personas tóxicas son terribles. Las víctimas cuando identifican qué está ocurriendo ya es demasiado tarde, debido a que son tan hábiles a la hora de manipular y someter a los demás, que las heridas son demasiado profundas cuando las víctimas son conscientes de lo que ha pasado. Por ese motivo, toda aquella persona que ha caído en las redes de esta clase de personas necesitarán de una intervención psicológica si quieren recomponerse, y sanar todas sus heridas.

Ninguna persona merece que nadie se aproveche de ella. Tenemos que entender que esta clase de personas son despiadadas, y con capaces de generar un alto sufrimiento y dolor en sus víctimas, si con ello consigue de ellas todo lo que desea. Debemos aprender a identificarlas, y tenemos que aprender cómo libertarse de las personas tóxicas. Es fundamental que sepamos diferenciar e identificar a las personas que entran en nuestras vidas, y quedarnos solo con aquellas que aportan y suman. Y por ello es importante aprender cómo liberarse de las personas tóxicas.

Cómo son las personas tóxicas

Las personas tóxicas son personas despiadadas que únicamente miran por ellas. Es difícil identificarlas porque son capaces de camuflar sus malas intenciones con buenos gestos y palabras, y de ese modo logran que sus víctimas confíen en ellos. Cuando esto ocurre intentarán conseguir por todos los medios aquello que desean de sus víctimas, y no dudarán en emplear tácticas como la manipulación, el chantaje o incluso el abuso para conseguir someter a su víctima, y conseguir alcanza todos sus objetivos de ella. Pero hay ciertos rasgos que pueden ayudarnos a la hora de identificar a esta clase de personas. Y estos son:

  • Autoestima baja. Son personas con multitud de complejos e inseguridades. Se perciben incluso a si mismas como personas incapaces, que necesitan a los demás para conseguir aquello que desean. Esa autoestima baja la suplen proyectando esas inseguridades en los demás. Por ese motivo, intentarán destruir la autoestima de sus víctimas, y de ese modo, aprovecharse de ellas más fácilmente.
  • Personalidad Narcisista. Esta clase de personas quieren ser el centro de todo. Sus conversaciones y sus actos siempre van dirigidos hacia su persona. Quieren que los demás lo valoren como se merece, y hará todo lo posible por ensalzarse y de paso empequeñecer a los demás. Necesitan someter a los demás para sentirse superiores.
  • Carecen de empatía. Las personas tóxicas son incapaces de ponerse en el lugar de los demás. Para ello lo fundamental son sus intereses, y sus necesidades. No les importa lo más mínimo los demás, ni el daño que puedan hacerles. Solo les importa conseguir sus objetivos personales.
  • Inmadurez emocional. Quien es capaz de aprovecharse de los demás es debido a sus propias carencias emocionales. Son personas inmaduras que solamente actúan por su propio bien, sin tener en consideración a los demás. No soportan la frustración, y tienen que conseguir aquello que quieren a toda costa, sin importarles del sufrimiento que puedan generar a los demás. Son muy infantiles, y caprichosos.
  • Incapacidad para relacionarse. Cuando una persona solamente mira por ella, y considera a los demás como simples herramientas necesarias para conseguir aquello que desean, suelen tener relaciones superfluas e interesadas. Por ese motivo nunca tendrán amigos ni parejas estables, ya que su incapacidad para relacionarse sanamente al final minan y destruyen toda relación que puedan tener. 

Las heridas que producen las personas tóxicas

Las personas tóxicas tienen como objetivo primordial acabar con la autoestima de sus víctimas. Una persona que acabe por no valorarse, será más fácilmente manipulable, y por tanto, se someterá con más facilidad. Es por ese motivo, que todos los esfuerzos de esta clase de personas es destruir por completo lo que sus víctimas son, para convertirlas en la sombra de quienes fueron. Su objetivo es reducir la capacidad de sus víctimas para enfrentarse a ellos.

Estar atentos a los ataques de las personas tóxicas puede hacer que las víctimas desarrollen un cuadro ansioso. La gran angustia que padecen y los elevados niveles de estrés que sufren hacen que lleguen a desarrollar una intensa ansiedad. También su estado de ánimo se verá seriamente dañado. No podemos sentirnos bien cuando nos sentimos utilizados, más aún cuando tenemos en consideración a esa persona.

Una persona tóxica siempre conseguirá que sus víctimas se sientan mal. Les hará sentir culpables, inseguras, etc. La cuestión es que destruyendo todo lo que son sus víctimas consiguen de ellas todo lo que quieren. Eso favorece la aparición de ciertas emociones negativas, como el rencor, la ira, o la rabia. Las heridas emocionales son tan profundas e intensas que deben ser tratadas psicológicamente. Por todo ello es esencial que aprendamos cómo liberarse de las personas tóxicas.

Cómo liberarse de las personas tóxicas

Tenemos que comenzar a seleccionar a las personas que nos rodean. Parte de nuestro bienestar emocional y nuestra salud psicológica depende de quienes permitimos que entren en nuestras vidas. No tenemos por qué estar con alguien que nos haga daño y se aproveche de nosotros. Debemos aprender lo importante que es estar siempre rodeados de personas que suman y que nos aportan valores, cariño, y respeto. Es por ese motivo que debemos aprender a identificar a esta clase de personas tóxicas, para poder alejarnos de ellas.

Es inútil esperar cambios en este tipo de personas. Quienes se aprovechan de los demás son incapaces de cambiar, y si lo hacen es siempre a peor. Por lo tanto, debemos tener la valentía de alejarnos lo más posible de estas personas. No tenemos por qué aguantar la basura emocional de nadie, ni sus reproches y manipulaciones. Tenemos todo el derecho a seleccionar a las personas que están en nuestras vidas. Y debemos liberarnos de la compañía de quienes nos hacen daño.

De nada sirve poner límites a esa clase de personas. No nos respetarán, ni les importará el daño que pueda hacernos. Lo único que nos queda es alejarnos lo más posible de ellas. Y también debemos buscar toda la ayuda que sea posible, debido a que después de haber sido dañados por alguien tóxico, tenemos que reconstruir nuestra autoestima, mejorar nuestro estado de ánimo y volver a sentirnos bien. La terapia te dará todas las herramientas para sentirte bien de nuevo, y saber cómo liberarse de las personas tóxicas. ¡Adelante!

Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online

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