Relaciones con personas inseguras

Relaciones con personas inseguras

Uno de los mayores castigos en esta vida es no llegar nunca ser feliz. Es por ese motivo, que debemos comprender que las relaciones con personas inseguras, nos llevará a un sufrimiento tal que jamás podremos llegar a ser felices con ellas. Son personas cuya autoestima es realmente baja y dañina. Son propensas a padecer celos obsesivos, e intenta atrapar a los demás en sus miedos y desconfianzas patológicas.

Las relaciones con personas inseguras de carácter afectivas, puede llegar a dejar una herida muy dolorosa y difícil de sanar. Son personas con un perfil muy complicado. Viven con la duda, los celos y la envidia. Su autoestima es patológicamente baja. Desconfían de todo y todos, y requieren una atención constante y enfermiza.

Cuando el miedo es nuestro dueño hace que actuemos de un modo errante e irreflexivo. Es así como se comportan las personas inseguras. Sus temores les hacen sufrir, y a su vez ellos hacen sufrir a toda persona de su alrededor. La inseguridad siempre provoca dolor.

Si iniciamos relaciones con personas inseguras, pronto caeremos en la cuenta de todas sus sombras, sus dudas, y su desconfianza patológica. Podemos ver como son incapaces de exponerse o arriesgar. Necesitan tener todo bajo su control, incluso a sus parejas o personas que están a su alrededor. Si no es así, su ansiedad se elevará dramáticamente.

Por otro lado, decir que todos experimentamos, en mayor o menor medida, cierta inseguridad. Es algo normal, pero todo intentamos superar ese estado, para poder así ser más solventes en nuestro día a día. Pero, sin embargo, en el ámbito afectivo, la inseguridad puede ser muy peligrosa.

Quedar atrapados en el miedo nos enturbia nuestro modo de pensar, de sentir y de actuar. Ello unido a la baja autoestima puede empujar a la persona que lo padece, a crear una serie de vínculos emocionales totalmente dañinos, tanto para ella misma como para los demás. Incluso pueden llegar a desarrollar algunos trastornos psicológicos.

Características de las relaciones con personas inseguras

Las relaciones con personas inseguras se basan prácticamente en el miedo. El miedo a perder es lo que hace que cualquier persona pueda volverse insegura. Incluso existen personas que se niegan a relacionarse con los demás para evitar aquello que tanto temen. Son personas que se niegan a sentir, amar, y a ser ellos mismos. Todo por el terrible miedo de ser rechazados por aquellas personas que quieren y aman.

Una de las características fundamentales de esta clase de relaciones, es que la persona insegura no busca que su pareja sea su espejo, necesita algo más. La persona amada tiene la obligación de ser el foco que potencia y hace más grande las virtudes de la persona insegura. Así se convierte en su sustento emocional, y debe ser siempre nutrido mediante refuerzos positivos, como son los halagos, o los gestos afectuosos. Esta clase de personas necesitan sentirse constantemente valorados y adorados. El ser amado se convierte en un objeto destinado a fortalecerse emocionalmente.

Estas relaciones desgastan emocionalmente a ambas partes. A la persona insegura porque cada necesitará más gestos aduladores por parte de su pareja, y la otra parte se sentirá totalmente agotada de intentar engrandecer e iluminar a esa persona. Al final, quien adula e ilumina a una persona, acaba por apagarse así mismo, y eso tiene un precio en la salud mental y emocional.

En las relaciones con personas inseguras pueden sucederse dos realidades totalmente diferentes. La persona que es insegura, suele emplear dos tácticas distintas para poder controlar completamente a su pareja. Y estas son:

  • Victimizarse. Hacerse la víctima es la primera táctica que utilizan las personas inseguras. Dan a entender a la otra persona que no está haciendo lo suficiente, y por tanto está fallándole. Hará creer a los demás, que son egoístas, porque cree que no le prestan la atención que ella necesita, haciéndoles sentir culpables de su infelicidad constante y de su malestar.
  • Engrandecerse. Aunque sufra un gran sentimiento de inferioridad, estas personas intentarán empequeñecer a su pareja o a las personas que le rodean, ya que así se sienten en una posición más cómoda, pudiendo controlar a los demás. Su ansiedad, de ese modo, no eleva peligrosamente. No dudará, de ese modo, de infravalorar a su pareja, y de despreciar sus logros o virtudes. De ese modo puede mermar la autoestima de la persona que quiere someter.

Origen de la inseguridad emocional

Diversos estudios han apuntado que el origen de la inseguridad afectiva y emocional, está relacionado con los apegos que hemos desarrollado en la infancia. Es decir, del nivel de autónomos o dependientes que hemos sido de pequeños. Una crianza basada en el rechazo, y en la negación de las necesidades básicas y emocionales, hace que el niño crezca de un modo inseguro y dependiente emocionalmente, hablando. Es una teoría muy recurrente que puede arrojar las claves de las causas de la inseguridad.

Todos los apegos están basados en el miedo. En este caso estaría el miedo a la pérdida, al rechazo, o no sentirse valorado. Cuando un niño crece con esas carencias, se convierte, irremediablemente, en un adulto totalmente inseguro.

Cómo actuar ante relaciones con personas inseguras

Las relaciones con personas inseguras jamás son sencillas y fáciles. Puede que ahora mismo estés pasando por ello. Es posible que nosotros mismo seamos esa persona insegura, llena de miedos, con dudas constantes, y con la sensación de que podemos ser abandonados por las personas que queremos y amamos.

La baja autoestima y la inseguridad debe tratarse. No podemos vivir con esa carga eternamente. Quizás hemos arrastrado ese modo de ser desde la infancia, pero debemos ponerle fin y cambiar. Para ello es esencial aceptar la problemática que estamos padeciendo, sin poner excusas, y buscar ayuda psicológica.

Debemos tratar las ideas irracionales que nos empujan a la inseguridad. De igual modo, hemos de tratar la desconfianza y los vacíos emocionales que nos impiden nuestro crecimiento personal, nuestra fortaleza psicológica y nuestra madurez emocional. Y solamente podemos conseguirlo mediante terapia psicológica.

En el amor nunca hay que exigir nada, y mucho menos sacrificios. El amor es solamente compromiso. Un compromiso libre y maduro. Para ello debemos estar bien psicológica y emocionalmente. Solo de ese modo podemos establecer relaciones sanas y estables. ¡Adelante!

Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online

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