
“Cuando dices: no dejo de pensar en mi expareja, no es amor lo que te ata, sino la ausencia de lo que imaginaste vivir. Sanar es aceptar que mereces algo más que un recuerdo.” — Psicólogo Emocional Online
Toda ruptura es traumática en menor o mayor grado. Cuando nos enfrentamos al fin de nuestra relación, entraremos en un proceso de duelo en el cual tenemos que asumir lo que ha pasado, y eso requiere de tiempo y esfuerzo. En todo ese proceso es normal decirnos la frase “no puedo dejar de pensar en mi expareja”, y ello ocurre porque no podemos acallar a nuestro corazón, aunque esa persona nos haya podido hacer muchísimo daño, no podemos olvidar y dejar a un lado nuestros sentimientos.
Tener presente en nuestra mente y en nuestro corazón a nuestra expareja, puede ser un gran obstáculo a la hora de pasar página y seguir con nuestro camino. Es muy normal recordar a la persona con la que hemos compartido y sentido tanto. Lo patológico es cuando no somos capaces de asumir que la otra persona ya no nos quiere como antes, y quiere seguir su camino. Cuando amamos, tenemos también que asumir la pérdida, porque la vida en un momento u otro, y por el motivo que sea, puede separarnos de las personas que queremos o amamos.
Como ya he dicho, no podemos olvidar a las personas que han formado parte de nuestras vidas, pero no debemos centrarnos en ellas. Es decir, no podemos olvidar a una expareja, pero cuando una relación se termina, no debemos centrarnos en esa persona, sino en nosotros, y en nuestra recuperación. Al final, somos responsables de nuestro bienestar, y de vivir nuestras vidas, sin depender de nadie ni de nada.
Es cierto que una ruptura suele ser traumática, pero el dolor que se experimenta al principio irá bajando de intensidad hasta que logremos superar esa mala experiencia. Que afirmes eso de “no puedo dejar de pensar en mi expareja” al principio es algo normal, pero si ese dolor no baja de intensidad, y el recuerdo se convierte en una obsesión, deberemos buscar ayuda profesional, ya que no habremos hecho un proceso de duelo adecuado, y las heridas no se habrán cerrado ni sanado.
No dejo de pensar en mi expareja
Toda ruptura, por muy civilizada y constructiva que esta sea, siempre genera una serie de traumas, que ambas personas deben gestionar por separado. Hay veces que después de la finalización de una relación sentimental, una de las partes no sabe cómo encajar lo ocurrido, y no sabe cómo gestionarlo. Ello le llevará a padecer ciertos trastornos emocionales, además de crear ciertos pensamientos de carácter obsesivo como es la afirmación “no dejo de pensar en mi expareja”.
Cuando nos enfrentamos a una pérdida, tenemos que afrontar un verdadero proceso de duelo, que nos permita asumir esa ruptura, superarla y continuar con nuestro camino. Es importante poder asumir la pérdida para poder afrontarla adecuada y constructivamente. Por ese motivo es esencial escuchar a nuestras emociones, y en el caso de que no podamos afrontarlo solos, tenemos la obligación con nosotros mismos de buscar ayuda profesional.
Si te preguntas: ¿por qué no puedo parar de pensar en mi pareja? Debes comprender que no has asumido adecuadamente esa pérdida y, por tanto, eres incapaz de hacer frente a ese dolor y a ese sufrimiento. Quizás haya pasado mucho tiempo desde que vuestra relación finalizó, pero cuando las heridas no se curan, siempre permanecerán abiertas.
Un duelo no efectuado de forma natural y sana nos impide afrontar nuestro dolor, y esas heridas nos dolerán hasta que no nos decidamos a sanarlas. El hecho de no dejo de pensar en mi expareja, es un gran indicador que nos ayuda a identificar que existe un problema serio, y que debemos tomar las decisiones que sean mejor para nuestra salud emocional y psicológica, como es el hecho de buscar ayuda profesional para asumir y superar nuestra pérdida.
Diferencias emocionales entre asumir una ruptura y no aceptarla
| Asumir una ruptura | No aceptar la ruptura |
|---|---|
| Predomina la aceptación y el proceso natural de duelo, permitiendo sanar y crecer emocionalmente. | Predomina la negación y resistencia, bloqueando el avance y perpetuando el sufrimiento emocional. |
| Se genera un aprendizaje y apertura a nuevas oportunidades y experiencias. | Se mantienen expectativas irreales de reconciliación y se idealiza la relación pasada. |
| Favorece la reconstrucción de la autoestima y el establecimiento de límites saludables. | Puede provocar dependencia emocional, baja autoestima y patrones negativos repetitivos. |
| Se adapta gradualmente a la nueva realidad y se recupera el bienestar emocional. | Las emociones conflictivas afectan la salud mental y social, dificultando la recuperación. |
| Impulsa la resiliencia y prepara para futuros retos afectivos con mayor fortaleza. | Obstaculiza el duelo natural y puede derivar en trastornos emocionales como ansiedad o depresión. |
Cuando es imposible asumir la ruptura
Debemos entender que toda ruptura sentimental requiere de un proceso de duelo. Es decir, tenemos que llegar a asumir la pérdida para poder pasar página. Pero hay casos en los cuales ese proceso no se hace correctamente, o la persona se atasca en su dolor, y es incapaz de asumir la propia ruptura con su pareja, quedándose atrapada en el dolor. En esos momentos, la persona incapaz de realizar un proceso de duelo correcto, se llegará a preguntar a sí misma: ¿Por qué no puedo dejar de pensar en mi expareja? Es una pregunta muy normal, e intentaré darle respuesta en este artículo.
Cuando nuestra mente se queda atrapada en el recuerdo de la persona que hemos amado, y todas las vivencias que van asociadas, ello nos hace daño porque no nos deja avanzar. En una ruptura tenemos que asumir que nuestra relación con nuestra expareja, es una relación fallida, y es imposible compartir nuestro camino con esa persona. Por tanto, es necesario asumir nuestra pérdida, y de ese modo, aceptar una vida alejados de la persona que tanto hemos amado.
Hay amores que nos atrapan para siempre, pero debemos comprender que, por mucho que queramos, las relaciones se pueden marchitar, y lo hacen tanto, que los lazos que nos une a esa persona, se pueden romper para siempre. Y entonces desearíamos tener un botón que nos permita superar lo ocurrido, y borrar para la eternidad todos esos sentimientos, pero eso es imposible. El dolor y el sufrimiento que provoca una ruptura deben afrontarse de un modo directo y sincero.
Todo lo que hemos sentido por nuestra expareja no se puede borrar, por mucho que lo intentemos. Cuando una ruptura no se llega a superar, caminaremos siempre mirando a un pasado que nos hizo daño. Porque en estos casos, nunca recordamos los malos momentos, y somos bastante permisivos con la persona que ha sido nuestra pareja, cuando la relación no ha sido idílica, porque todo ha fallado. Es importante aceptar la pérdida para avanzar, y si no somos capaces de hacerlo de un modo natural, deberemos buscar ayuda psicológica.
El dolor de no poder dejar de pensar en mi expareja
Aferrarse al recuerdo de una relación fallida nos causará un dolor muy profundo. Si caemos en esa trampa, no podremos hacer un proceso de duelo adecuado, y eso nos sumergirá en un sufrimiento enorme del cual no podemos salir por nosotros mismos. El duelo nos permite ir poco a poco aceptando lo ocurrido, y de ese modo, rebajar la intensidad de nuestro dolor, pudiendo pasar página con el tiempo. Por eso es tan importante.
Afrontar una ruptura nos llevará seguramente a padecer un estado de ánimo bajo, y ello puede hacer que padezcamos un cuadro depresivo. Es muy difícil mantenernos emocionalmente estables cuando nos enfrentamos a una terrible pérdida, como es el hecho de enfrentarnos a la ruptura con nuestra expareja. En estos casos es muy normal que aparezcan emociones tan negativas como la ira, el rencor o incluso la culpa. Enfrentarse a la pérdida es realmente complicado, y a menudo necesitaremos ayuda. Eso hay que tenerlo en cuenta.
La ansiedad es otra de las consecuencias de no aceptar la ruptura, y tener muy presente a la expareja. Cuando te separas de alguien, solemos experimentar un gran estrés, ya que nos enfrentamos a una nueva realidad, y eso nos da miedo. Ese miedo es típico de la ansiedad por separación. Además, también podemos experimentar la necesidad de evitar situaciones que se asemejen a esas que nos hicieron daño. Por ejemplo, podemos dejar de relacionarnos con según qué personas por el miedo al rechazo o al abandono. Eso es típico de quien no ha superado una ruptura sentimental, pudiendo llegar a padecer un episodio de estrés postraumático.
Por último, debemos señalar que cuando nos enfrentamos al hecho de que nuestra relación con nuestra expareja se ha roto, puede que comencemos a culpabilizarnos, y a dudar de nosotros mismos. Es bastante común que la quien sufre ese dolor intenso propio del que se experimenta en una ruptura, se comience a cuestionarse a sí mismo, y de su valía. Se puede padecer una bajada brusca de la autoestima. Son muchas las secuelas de no poder hacer un proceso de duelo correcto, y por eso debemos aprender qué hacer si no somos capaces de pasar página, y no dejar de pensar en nuestra expareja.
Pasan los años y no dejo de pensar en mi expareja
Como todos sabemos, aquellas experiencias que han dejado una huella profunda en nuestra alma, no acaban por desaparecer. Si hemos podido hacer un proceso de duelo natural y positivo, esas experiencias se convertirán en simples recuerdos, pero si no hemos logrado superar esa gran pérdida, esas experiencias siempre nos dolerán, convirtiéndose en un verdadero trauma.
Todos conocemos a personas que afirman que “no dejo de pensar en mi expareja”, o somos nosotros mismos quienes lo afirmamos. Es una señal inequívoca de no haber aceptado ni superado nuestra pérdida. Y cuando esa pérdida no se supera, su eco perdurará para siempre, al menos que tomemos la decisión de pedir ayuda para afrontar ese dolor. Lo cierto es que no podemos vivir siempre sumergidos en el recuerdo de esa relación. Es esencial poder pasar página y seguir con nuestro camino. No podemos esperar a que pasen los años sin dar ese gran salto hacia delante.
Secuelas de una ruptura sentimental
Las rupturas sentimentales siempre dejan una sensación de vacío difícil de gestionar. Todos esos sentimientos pueden dar paso a emociones tales como la tristeza, la desesperanza, o la angustia. Emociones que pueden dañarnos y generar en nosotros un gran sufrimiento. Incluso podemos llegar a experimentar emociones tan dañinas como el rencor o la rabia, y es entonces cuando nosotros mismos podemos llegar a destruir todo aquello que somos.
Comprobar cómo la persona que amamos se ha marchado de nuestras vidas sin más, es algo que debemos asumir, pero en ese proceso es muy normal que experimentemos una bajada drástica de nuestro estado de ánimo. Incluso la depresión es parte del proceso de duelo que tenemos que realizar para superar nuestra ruptura. Sentir una gran tristeza al principio es muy común, incluso necesario, pero si ese dolor sigue con la misma intensidad durante mucho tiempo, debemos buscar la ayuda necesaria para poder superarlo.
Como ya he citado anteriormente, sufrir una ruptura de este tipo es un hecho traumático, y si no sabemos gestionarlo adecuadamente, puede dar paso al estrés postraumático. La angustia que nos genera esa nueva situación nos puede llevar a sufrir un gran estrés, favoreciendo la aparición de la temida ansiedad. Intentar revivir lo sucedido intentando cambiar algo es algo muy habitual, lo malo que eso nos hará más daño, y generará un gran sufrimiento.
Quedarnos sujetos a ese pasado traumático hace que nos centremos en algo y en alguien que ya no está en nuestras vidas, ni lo estará. Esos pensamientos recurrentes que se esconden en la afirmación “no puedo dejar de pensar en mi expareja”, nos convertirán en personas dependientes de un pasado que no volverá, es decir, en la sombra de lo que un día fuimos.
También cabe decir que el hecho de no asumir una ruptura hará mella en nuestra autoestima, y en la seguridad en nosotros mismos. Es muy habitual no valorarse, o no quererse cuando hemos sido abandonados por la persona que amamos. Pero cuando la otra persona haya querido romper con nosotros, no tiene nada que ver con nuestra valía. Somos los mismos que iniciamos la relación, simplemente el amor a veces se acaba, y debemos asumirlo sin cuestionarnos ni echarnos más tierra encima.

“Superar una ruptura no significa olvidar a quien amaste, sino recordarte a ti mismo que mereces paz, crecimiento y un nuevo comienzo. Sanar es una forma de amor propio.” — Psicólogo Emocional Online
Qué puedo hacer para dejar de pensar en mi expareja
Si te preguntas: ¿Por qué no puedo dejar de pensar en mi expareja? Es porque no has podido realizar tu proceso de duelo, y te has quedado atascado en el dolor. Un primer paso es analizar las causas de la ruptura, y cómo te sentías en esos momentos. No podemos caer en el error de idealizar la relación solamente por los buenos tiempos. Tener una perspectiva real de lo ocurrido nos permitirá asumir, quizás, que era necesaria esa ruptura.
Debemos también tener en cuenta de que los sentimientos cambian, y todas las parejas sufren baches que van desgastando la propia unión. Hay relaciones que se salvan, y otras que acaban por romperse. Cuando una relación se rompe, es porque ya no funciona, y de nada sirve buscar culpables, o quedarse atrapado en el recuerdo para no aceptar lo ocurrido. Todo dolor hay que afrontarlo, y no dejar que nos atrape y no nos deje avanzar.
No hay un botón mágico que nos permita olvidarnos de nuestra expareja, y de la relación que hemos tenido con ella. Pero podemos asumir esa pérdida de un modo sano, y eso se consigue mediante el perdón, y a través de un duelo constructivo. Si no puedes hacerlo por ti mismo, y no sabes cómo gestionar lo ocurrido, deberías buscar ayuda psicológica. Gracias a la terapia podrás tener las herramientas necesarias para aceptar lo ocurrido, y poder seguir con tu camino. Apuesta por ti.
No dejo de pensar en mi expareja y me produce ansiedad
Intentar controlar nuestros sentimientos y pensamientos nos produce más ansiedad que dejar que estos fluyan de forma natural. Los traumas que no han sido superados se apoderan de nuestra mente, dejándonos en manos del miedo y la desesperanza. En estos casos la ansiedad se hace fuerte dentro de nosotros.
Cuando nos separamos de nuestra pareja, si no sabemos cómo gestionar ese hecho, puede generar la temida ansiedad por separación, es decir, un miedo atroz a estar en soledad sin la persona amada. Esos miedos e inseguridades harán que nuestro estrés se eleve irremediablemente, dando paso a la temida ansiedad.
Si afirmas que “no dejo de pensar en mi expareja”, es porque ese recuerdo se ha convertido en una auténtica obsesión, que genera una gran angustia y miedo. La ansiedad no desaparece sola. Nunca lo hace. A veces puede callarse durante un tiempo, pero al final siempre vuelve a aparecer. Por ese motivo, debemos siempre enfrentarnos a nuestro dolor, y dejar que nos hable. Asumir nuestro dolor es el primer paso para superarlo.

“La Terapia Online te acompaña en el proceso de sanar una ruptura, ayudándote a entender el dolor, fortalecer tu autoestima y reconstruir tu bienestar emocional desde cualquier lugar.” — Psicólogo Emocional Online
Beneficios de la Terapia Online cuando no dejo de pensar en mi expareja
Cuando una relación termina, puede ser difícil afirmar «no dejo de pensar en mi expareja». Este pensamiento recurrente puede interferir con la vida diaria, el bienestar emocional y la capacidad de avanzar.
La terapia online ofrece herramientas efectivas y accesibles para afrontar esta situación, ayudando a recuperar la paz mental y a superar la etapa de duelo emocional. A continuación, exploramos los principales beneficios de la terapia online para quienes enfrentan este desafío.
- Espacio seguro para procesar el duelo. La terapia online proporciona un entorno confidencial donde puedes expresar tus sentimientos de tristeza, nostalgia, enojo o frustración. Hablar abiertamente con un profesional ayuda a validar estas emociones y encontrar formas de gestionarlas.
- Identificación de pensamientos intrusivos. Los pensamientos constantes sobre una expareja suelen ser intrusivos y difíciles de controlar. Un terapeuta online te ayudará a identificar patrones de pensamiento negativos o repetitivos que están perpetuando el ciclo emocional.
- Trabajo en la gestión de emociones. Es común sentir una montaña rusa emocional tras una ruptura. La terapia online ofrece herramientas para regular las emociones intensas, como la tristeza, la ansiedad o el enojo, que surgen al pensar en la expareja.
- Desarrollo de resiliencia emocional. La resiliencia emocional es clave para superar una ruptura. La terapia online te guía para fortalecer tu capacidad de afrontar el dolor, aprender de la experiencia y salir fortalecido de la situación.
- Fortalecimiento de la autoestima. Pensar constantemente en una expareja puede minar la autoestima y hacer que te cuestiones tu valor personal. La terapia online trabaja para reconstruir tu autoconfianza, ayudándote a recordar tu valía, independientemente de la relación pasada.
- Identificación de patrones relacionales. Un terapeuta online te ayudará a analizar la dinámica de tu relación pasada, identificando patrones que pueden haber contribuido a la ruptura o que podrían repetirse en futuras relaciones.
- Reducción de la dependencia emocional. Si el pensamiento recurrente sobre tu expareja está vinculado a la dependencia emocional, la terapia online te ofrece estrategias para fortalecer tu independencia y construir una relación más sana contigo mismo.
- Reconexión con tus intereses y objetivos. Es común que una ruptura cause una desconexión de los intereses personales. La terapia online te ayuda a reenfocarte en tus propios proyectos, metas y pasiones.
- Evaluación de tus expectativas sobre la relación. Muchas veces, el pensamiento recurrente sobre una expareja está relacionado con expectativas no cumplidas. La terapia online te ayuda a reflexionar sobre estas expectativas, identificando si eran realistas o si puedes redefinirlas para el futuro.
- Mayor claridad sobre la ruptura. Un terapeuta online te guiará para explorar los motivos de la ruptura y cómo manejar cualquier sensación de culpa, arrepentimiento o resentimiento que pueda estar presente. Así dejarás de realizar la afirmación: «no dejo de pensar en mi expareja»
- Flexibilidad y accesibilidad. Una de las grandes ventajas de la terapia online es que puedes acceder a sesiones desde la comodidad de tu hogar, adaptándolas a tu horario. Esto facilita el inicio del proceso terapéutico sin interrupciones en tu rutina.
- Preparación para futuras relaciones. La terapia online no solo te ayuda a superar el pensamiento constante en tu expareja, sino que también te brinda herramientas para construir relaciones más saludables en el futuro.
- Apoyo en el manejo de recaídas emocionales. Es común tener recaídas emocionales después de una ruptura. Con la terapia online, recibirás estrategias para manejarlas de manera efectiva, evitando que estas recaídas afecten tu progreso.
Preguntas frecuentes sobre no dejo de pensar en mi expareja
Es normal experimentar pensamientos recurrentes tras una ruptura debido a la carga emocional, los recuerdos compartidos y el proceso de adaptación a un cambio importante en la vida.
Practicar la distracción saludable, establecer nuevas rutinas, conectar con amigos y actividades que disfrutes, y buscar apoyo emocional ayuda a reducir el impacto de esos pensamientos.
No hay un tiempo exacto, pero comúnmente el proceso de duelo toma semanas o meses. Cada persona procesa a su ritmo, y es importante ser paciente y permisivo con uno mismo.
Aunque intentar evitar los pensamientos puede parecer útil, lo más eficaz es reconocerlos sin juzgar y luego enfocarse en acciones positivas que promuevan tu bienestar.
Si los pensamientos interfieren gravemente con tu vida diaria, emociones o relaciones, o si sientes tristeza profunda y desesperanza, es recomendable consultar a un psicólogo o terapeuta.
Cómo afrontar el «no dejo de pensar en mi expareja»
Una gran pérdida, como una ruptura sentimental, requiere de un proceso de duelo, pero hay personas que son incapaces de iniciarlo y, por tanto, requiere de ayuda psicológica. Aquellas personas que no pueden pasar página, sufrirán siempre un dolor y un sufrimiento difícil de soportar. Las experiencias negativas que no hemos superado siempre nos acompañarán, solamente afrontándolas y superándolas podremos dejar atrás ese dolor, y podemos seguir nuestro camino.
Si afirmas que «no dejo de pensar en mi expareja», quizás deberías plantearte buscar ayuda profesional. La terapia te ayudará en tu proceso de recuperación, y gracias a ella podrás superar ese dolor, y sanar todas esas heridas de tu alma. Para pasar página necesitas asumir tu sufrimiento. Es siempre el primer paso para poder superar cualquier hecho traumático. Apóyate en tus seres queridos, y busca ayuda psicológica si no sabes cómo gestionar tu dolor. No dejes nunca las heridas abiertas. Tienes la responsabilidad contigo mismo de sanarlas. ¡Adelante!
Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online
Sobre Daniel Molina
Soy Daniel Molina (n.º colegiado: 20237), Psicólogo Clínico especialista en Terapia Online con más de 12 años de experiencia.


