Qué es la indefensión aprendida

Aunque creamos lo contrario, lo más normal es cometer fallos o directamente fracasar, y tener logros es de lo más esporádico. Pero la vida es aprendizaje, y aprendemos a base de ensayo y error. Saber qué es la indefensión aprendida nos ayuda a comprender que no podemos asumir que hagamos lo que hagamos, nada valdrá la pena. Para conseguir avanzar necesitamos cometer fallos, porque esos errores forman parte del camino.

Este estado mental negativo, no solo nos limita a la hora de intentar avanzar, sino que también nos puede afectar a nuestro bienestar emocional y psicológico. A lo largo de este artículo descubriremos qué es la indefensión aprendida, sus señales, como nos puede afectar, y cómo podemos abordarla. No podemos autocastigarnos por cometer algún error, y no quieres avanzar por la creencia de que no somos capaces de conseguir nada.

Qué es la indefensión aprendida

Podríamos definir la indefensión aprendida como un estado mental en el cual una persona, tras sufrir experiencias o situaciones totalmente negativas de una forma constante, llega a la conclusión de que no puede hacer nada para cambiar su situación, y conseguir logros. Es no valorarse, y creer que no somos capaces de cambiar nada para tener resultados positivos. El dolor a menudo no nos deja ver más allá,

Sabiendo que es la indefensión aprendida, podemos entender que, las personas que la sufren suelen enfrentarse a muchos obstáculos en su vida personal, laboral, académico o emocional. Por culpa de las experiencias negativas y traumáticas de un pasado no superado, podemos llegar a creer que cualquier esfuerzo es inútil. No solamente genera pasividad esa postura, sino que también destruye la autoestima y la motivación de quien la sufre, creando un círculo vicioso difícil de romper.

Señales de la indefensión aprendida

Para saber realmente qué es la indefensión aprendida debemos tener muy en cuenta sus señales, y así poder identificarla. Delante de cualquier problema grave puede manifestarse las siguientes señales:

  • Desmotivación general. Ante una adversidad que no sabemos como gestionar, podemos dejar de prestarle la atención que requiere, porque podemos estar convencidos de que no sirve para nada actuar, porque nada cambiará. La fata de motivación es una de las características o señales más comunes de la indefensión aprendida.
  • Ansiedad y estrés. Ante la percepción que no podemos controlar nada de lo que ocurre en nuestro entorno, puede generarnos un gran nivel de estrés, que prolongado en el tiempo puede dar paso a la temida ansiedad. Estar tan enfocados en lo que no podemos hacer nos roba aquello que sí podemos controlar.
  • Baja autoestima. Quien cree que haga lo que haga no cambiará nada, se puede cuestionar quién es, y su propia valía. Creer que no somos capaces de cambiar nada, y no poder enfrentarnos a las adversidades, puede generar sentimientos de inutilidad o incompetencia. Saber qué es la indefensión aprendida nos ayuda a comprender que quien la sufre suele tener una autoestima totalmente dañada.
  • Pasividad y evitación. Quien está sufriendo una indefensión aprendida siempre va a tender a evitar nuevos retos o conflictos que no pueda manejar fácilmente. Su miedo a fracasar puede llevarle a la máxima pasividad, y a adoptar conductas de evitación
  • Síntomas depresivos. Estar subyugados al miedo a fracasar, y a creerse una persona incapaz, puede hacer mella en nuestro estado de ánimo. Si sabemos qué es la indefensión aprendida, podemos comprender que se caracteriza por sentimientos de desesperanza y apatía, síntomas propios de la depresión.

Causas de la indefensión aprendida

Para comprender mejor qué es la indefensión aprendida tenemos que saber sus causas, y estas suelen estar vinculadas a experiencias traumáticas o repetidamente frustrantes. Y entre las causas más comunes encontramos:

  • Experiencias de fracaso continuo. Si hemos intentado muchas veces hacer frente a adversidades y problemas que al final no hemos podido solucionar, podemos desarrollar la creencia de que no importa lo que hagamos, si no somos capaces de afrontar nada con éxito. 
  • Maltrato o abuso. Las personas que han sido víctimas de maltrato y de abusos, tanto físico como psicológico, pueden desarrollar una indefensión aprendida, al sentir que nunca han podido escapar de esa situación, y de todo lo que puedes llegar a sentir.
  • Entornos controladores. Cuando alguien ha crecido en ambientes familiares, laborales o académicos, asfixiantes y muy controladores, donde cualquier esfuerzo es menospreciado o ignorado, y donde el castigo está muy presente ante cualquier tipo de error, puede aparecer la indefensión aprendida.
  • Situación económica o social desfavorable. Estar en una situación económica negativa, ya sea por estar desempleado de forma prolongada, o por otras circunstancias adversas, pueden contribuir al desarrollo de indefensión aprendida, debido a que las personas que lo padece piensa que no tienes las herramientas para mejorar su situación.

Consecuencias psicológicas de la indefensión aprendida

Para saber qué es la indefensión aprendida debemos también conocer las consecuencias psicológicas de este estado, que va mucho más allá que el desconsuelo y la frustración. Su impacto es realmente grave en nuestra salud mental y emocional de quien la padece. Y entre las consecuencias más comunes encontramos:

  • Depresión. Si no somos capaces de ver una salida factible a nuestros problemas, podemos caer en la más profunda tristeza y desmotivación, que sino somos capaces de gestionarlo, puede favorecer la aparición de la temida depresión.
  • Ansiedad. Estar tan pendientes y enfocados en aquello que nos supera y no sabemos afrontar, puede hacer que nuestros niveles de estrés pueden verse muy elevados, y ello prolongado en el tiempo puede dar paso a la ansiedad. Es un estado de angustia constante, difícil de gestionar.
  • Deterioro en las relaciones. Sabiendo qué es la indefensión aprendida podemos intuir que tiene su repercusión en las relaciones que podamos tener. Percibirse como una persona incapaz puede hacer que nos aislemos, o que tengamos relaciones basadas en la necesidad y en la dependencia.
  • Autoestima baja. Si percibimos que somos un fracaso, y nuestros errores es por cómo somos, hará que nuestra autoestima se vea seriamente dañada. No podemos sentirnos bien con nosotros mismos si tenemos una visión negativa de todo lo que somos, y de todo lo que valemos.

Cómo saber si soy víctima de la indefensión aprendida

Para saber qué es la indefensión aprendida, y si la sufres, puedes hacerte las siguientes preguntas:

  • ¿Te sientes atrapado en una situación que te hace infeliz?
  • ¿Crees que no tienes ninguna capacidad de cambiar tu realidad?
  • ¿Has dejado de luchar por tus metas o tus sueños?
  • ¿Te sientes culpable o responsable de los problemas que te ocurren?
  • ¿Te cuesta tomar decisiones o asumir riesgos?
  • ¿Te sientes solo o incomprendido por los demás?
  • ¿Has perdido el interés o el placer por las cosas que te gustan?
  • ¿Te sientes triste, ansioso o deprimido con frecuencia?

Si has respondido afirmativamente a varias de estas preguntas, es posible que estés sufriendo de indefensión aprendida. No te preocupes, hay una solución para ti. Puedes afrontarlo con la ayuda adecuada.

Diferencias entre autoconfianza y la indefensión aprendida

AutoconfianzaIndefensión Aprendida
La persona cree que sus acciones pueden influir en el resultado.La persona cree que sus acciones no tendrán efecto alguno, independientemente de lo que haga.
Alta autoestima y creencia en sus capacidades.Baja autoestima y sensación de inutilidad.
Motivación para enfrentar desafíos.Pasividad y evitación de situaciones difíciles.
Optimismo frente a nuevas oportunidades.Pesimismo y miedo al fracaso.

Cómo afrontar la indefensión aprendida

Ahora que sabemos que es la indefensión aprendida, y su impacto sobre nuestra salud emocional y psicológica, debemos enfocarnos en como podemos afrontarla. El proceso nunca es sencillo, pero podemos afrontarla y volver a creer en nosotros mediante algunas estrategias que veremos a continuación Y estas son:

  • Identificar la problemática. Una vez que comprendemos qué es la indefensión aprendida, debemos asumir que la padecemos, y que hemos dejado de creer en nosotros. Identificar la problemática que estamos sufriendo es el primer paso para poder afrontarla con éxito.
  • Aumentar la autoestima. Comenzar a creer de nuevo en nosotros y en nuestras capacidades es esencial si queremos afrontar la indefensión aprendida. Tenemos que volver a ser amables con nosotros mismos, y volver a atrevernos, a intentar hacer cosas que nos dan miedo.
  • Reaprendizaje positivo. Volver a hacer cosas que podemos llevar a cabo, y recuperar el control acerca de todo lo que somos, es la clave para poder superar la indefensión aprendida. Si somos capaces de tener resultados positivos ganaremos confianza sobre nosotros mismos.
  • Busca apoyo. Para volver a creer en ti, y en todo tu potencial comienza a apoyarte en tus seres queridos. Sentirse arropado es esencial para volver a intentar hacer aquello que te da miedo. Seguro que las personas que están a tu lado te darán otra perspectiva acerca de todo lo que eres, y todo lo que vales.
  • Practica la relajación y la meditación. Es muy importante que tengas la mente centrada en cosas positivas. El deporte, meditar, o realizar técnicas de relajación, como la respiración diafragmática o profunda, te puede ayudar a creer de nuevo en ti, y en toda tu valía.
  • Apuesta por la terapia. Si quieres reconstruir tu autoestima, y volver a creer en ti apuesta por la terapia. Gracias a ella puedes tener las herramientas necesarias para afrontar la indefensión aprendida, y volver a ser tú mismo.
Beneficios de acudir a terapia

Beneficios de la terapia online para la indefensión aprendida

Sabiendo qué es la indefensión aprendida, decirte que la terapia online es una modalidad de intervención psicológica que se realiza a través de internet, mediante plataformas seguras y confidenciales. La terapia online tiene muchos beneficios para las personas que padecen indefensión aprendida:

  • Te permite acceder a un profesional cualificado desde cualquier lugar y en cualquier momento.
  • Te ahorra tiempo, dinero y desplazamientos.
  • Te ofrece una mayor comodidad, intimidad y flexibilidad.
  • Te facilita la expresión de tus emociones y pensamientos.
  • Te ayuda a romper el aislamiento y a sentirte acompañado.
  • Te proporciona herramientas para modificar tus creencias limitantes y tus conductas pasivas.
  • Te enseña estrategias para afrontar las dificultades y buscar soluciones.
  • Te motiva para recuperar tus ilusiones y tus proyectos.
  • Te ayuda a mejorar tu autoestima y tu bienestar.

Preguntas frecuentes sobre qué es la indefensión aprendida

La indefensión aprendida es un estado psicológico en el que una persona cree que no tiene control sobre las situaciones adversas en su vida, incluso cuando tiene la capacidad de cambiarlas. Este concepto fue desarrollado por el psicólogo Martin Seligman en la década de 1960. Las personas con indefensión aprendida tienden a sentirse impotentes y a renunciar fácilmente ante los desafíos.

Los síntomas comunes de la indefensión aprendida incluyen: 1. Pasividad frente a situaciones adversas. 2. Falta de motivación para intentar nuevas soluciones. 3. Frustración y estrés crónicos. 4. Baja autoestima y sentimientos de inutilidad. 5. Depresión y ansiedad. 6. Dificultad para resolver problemas. 7. Tendencia a generalizar fracasos a todas las áreas de la vida.

Para superar la indefensión aprendida: 1. Reconoce los patrones de pensamiento negativos. 2. Practica la reestructuración cognitiva para cambiar pensamientos negativos. 3. Establece metas pequeñas y alcanzables para construir confianza. 4. Aprende nuevas habilidades de resolución de problemas. 5. Busca apoyo social y profesional. 6. Practica el autocuidado y la autocompasión. 7. Celebra los pequeños éxitos y logros. 8. Considera la terapia cognitivo-conductual para tratar problemas más profundos.

Conclusiones sobre qué es la indefensión aprendida

Ahora que podemos saber qué es la indefensión aprendida, podemos comprender que es un fenómeno muy complejo, pero que puede superarse con la ayuda adecuada. Es cierto que puede afectar totalmente a la vida de una persona, sumergiéndole en una profunda tristeza y angustia. No creer en uno mismo es un auténtico castigo porque dejamos de ser quienes somos, y nos convertimos en la sombra de quienes fuimos.

Si crees que hagas lo que hagas no sirve para nada, decirte que es un enfoque totalmente equivocado. Puedes hacer muchas cosas, y hacerlas bien. Solamente necesitas sentirte bien contigo mismo, y no cuestionarte tu valía. Si sabes qué es la indefensión aprendida, debes comprender que tienes que buscar ayuda psicológica. La terapia online es una buena opción para tener la ayuda que necesitas. Así que, apuesta por la terapia y apuesta por ti.

Daniel Molina, Psicólogo Emocional Online

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